En el palacio de San Carlos bajo la sombra de Bolívar y Manuelita.
La recepción a la delegación asturiana en el Ministerio de Exteriores, que aquí llaman Cancillería, se complementa con una visita a este lugar histórico que de momento no está abierto al público.
Pese a que fuera afectado parcialmente por el “Bogotazo” de 1948, cuando la población se sublevó por el asesinato del líder progresista Gaitán, la mayor parte del edificio data del siglo XVI, y había servido de morada a familias de la aristocracia, luego fue seminario (hasta la expulsión de los jesuitas), allí se instaló la primera imprenta de Bogotá, fue la primera sede de la biblioteca pública, y del Batallón Guardia Presidencial.
El Presidente y Libertador Simón Bolívar trasladó allí la sede de gobierno de «La Gran Colombia», y es esta parte de la historia (incluida la personal de Bolívar) la que recuerda buena parte del mobiliario.
Después sería Cancillería, y justamente enfrente está el Teatro Colón, donde se firmaría la segunda versión del Acuerdo de Paz entre FARC y Estado Colombiano, con cuya ocasión se siembra en el patio un árbol de yarumo, en tanto que una palma y un nogal añoso parece que fueron mandados plantar por Bolívar, así que pasan de los 200 años.
Algunas peripecias del Libertador, como cuando le sacaron apresuradamente por una ventana cuando iban a asesinarle, o las relativas a la “Libertadora” Manuelita Saenz cuya casa está en la esquina cercana al palacio, se complementan con mapas antiguos, o con una sala noble donde se celebran reuniones de Estado y en la que la delegación astur se hizo la foto de rigor bajo el amparo de un cuadro de Bolívar “a tamaño natural” es decir a los 1,64 de su estatura física.
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