9 de abril: la delegación asturiana es invitada a Buenos Aires, Cauca, territorio de negritudes.
En el polideportivo municipal la alcaldía apoya la actividad de Solidaridad con las Víctimas, que desde el gobierno se había establecido para este día, en que hoy se cumplen 76 años del magnicidio de Jorge Eliecer Gaitán.
Si no le hubieran asesinado, y como se preveía hubiera sido electo presidente ¿la historia de Colombia habría sido distinta? ¿se habrían eliminado 76 años de guerra?
En el evento están muchas personas en condición de víctimas y a la espera de incrementar ( a través de las Mesas de interlocución con el gobierno) las atenciones, la búsqueda de justicia, el quiebre de la impunidad de los victimarios.
También representantes de muchas ramas institucionales, las que tienen responsabilidades en esta gestión delicada, con una cifra oficial de 9.659.204 víctimas del conflicto.
Y los consejos comunitarios de la zona, que son los mecanismos de organización y gestión propia de las comunidades negras, así como tres autoridades indígenas que recuerdan la terrible masacre del Naya de 2001, ocurrida un 11 de abril, conocida por la sevicia del actuar criminal de los grupos paramilitares, intervienen con sus palabras colectivas.
Si lo soñamos lo construimos, es el título de una de las canciones interpretadas en el marco de la llamada Memoria Sonora, que da participación cultural a varios grupos musicales, para “ayudar a pasar la tormenta” como dice otro de sus versos, para que en Colombia reine la paz.
Varias de las intervenciones aseguran que en Buenos Aires han sufrido todos los vejámenes y barbaridades del conflicto, que no termina.
Más música, más baile, la mandala con las semillas, las tamboras llamando a la paz, y la exigencia de que las víctimas de la zona sean atendidas a plenitud.
Seguramente que quien han luchado tantos años por conquistar la libertad, tengan mayor ímpetu para superar todo tipo de esclavitudes, como la de la guerra.
Para volver a tumbar coca y sembrar café, en el marco de los acuerdos de sustitución. Para que “el legado” de la Comisión de la Verdad, sea cumplimentado en cuanto a las recomendaciones que contiene el Informe.
La delegación asturiana baja hasta el río Cauca para despedirse allí de Aura Jimena Carabalí, que había participado en el programa asturiano de protección el año pasado, y que ha estado activamente preparando la jornada en Buenos Aires.
El río, que tanta Memoria esconde en su recorrido, ha sido declarado también como víctima colectiva, con miles de cuerpos arrojados a sus aguas para desaparecerlos algunos, para incrementar el horror militarista de control territorial en otros muchos casos.
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