Universidad Menéndez Pelayo de Cantabria-España afrenta a miles de víctimas de Colombia
Nuestro Colectivo rechaza la concesión de la Medalla de Honor 2016 al expresidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, por parte del Consejo de Gobierno de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, por «por su liderazgo político en la historia reciente de Iberoamérica y por su dedicación al servicio de la defensa de los derechos y libertades públicas en Colombia y en el continente americano».
Cuando supimos del premio pensamos que era un sarcasmo, luego creímos que era una broma de pésimo gusto, pero es peor: es una afrenta a decenas de miles de víctimas de violaciones muy graves de los Derechos Humanos cometidas por Uribe Vélez y la fuerza pública bajo su mando en los ocho años de su gobierno (2002-2010).
Uribe es responsable de al menos 4.700 ejecuciones extrajudiciales en nuestro país que desde hace más de un siglo abolió la pena de muerte. Uribe sacó una normativa que premiaba a los militares autores de éstos crímenes de lesa humanidad con ascensos, pagas extras y vacaciones. Las madres de varias víctimas del municipio de Soacha presentadas como “guerrilleros dados de baja en combate” visitaron con su dolor a cuestas el parlamento asturiano hace dos años clamando justicia.
Estos delitos graves están bajo exámen en la Corte Penal Internacional que expresó “Hay bases razonables para creer que los actos arriba descritos fueron cometidos siguiendo una política al menos al nivel de ciertas brigadas dentro de las fuerzas armadas, dando lugar a la existencia de una política de Estado u organizacional para cometer dichos crímenes”. Por su parte el Consejo de Estado de Colombia en Sentencia del 7 de septiembre del 2015 consideró las ejecuciones extrajudiciales como “práctica sistemática” del ejército colombiano. Por nuestra parte las consideramos actos de terrorismo de Estado.
Además durante los ocho años de su gobierno fueron asesinados al menos 1.200 sindicalistas y defensores de los Derechos Humanos en la absoluta impunidad, porque el expresidente hizo alianzas macabras con grupos de narco-paramilitares de la extrema derecha para copar el Congreso de la República y las instituciones de Justicia. Una tercera parte de los senadores de su bancada han sido condenados por sus vínculos con el narcotráfico y el paramilitarismo, una mezcla diabólica de política, narcotráfico, corrupción y exterminio sistemático de opositores, de la que aún no se repone Colombia y por la que está preso su propio hermano, Santiago Uribe Vélez.
Uribe Vélez ordenó violar la soberanía y la seguridad de la Unión Europea y de España al establecer por años oficinas y redes de espionaje ilegal con el fin de “neutralizar” opositores sociales y políticos. Las peligrosas operaciones tenían como objetivo personalidades e instituciones europeas y españolas y extendió sus tentáculos hasta Gijón, donde la policía secreta DAS -que dependía del despacho presidencial- espió a personas perseguidas por defender los Derechos Humanos en Colombia. En ese periodo fue secuestrado, torturado y asesinado nuestro compañero LUCIANO ROMERO MOLINA, sindicalista de la Nestlé asesinado por el DAS y los narco-paramilitares de alias Jorge 40 el 10 de septiembre del 2010, tras haber estado refugiado en Gijón.
Nuestro país, cansado de medio siglo de guerra, ha expresado la esperanza de una paz negociada entre el gobierno y las guerrillas, pero Uribe y la extrema derecha que son beneficiarias de la acumulación de tierras por despojo, están recogiendo en éstos días firmas contra la paz y organizando la “desobediencia civil” para que la guerra continúe.
La entrega de este premio inmerecido al fascista criollo por parte de una universidad pública española es una afrenta a todos nosotros-as y la convierte en cómplice de un personaje nefasto, enemigo de los valores democráticos y de los Derechos Humanos.
Pero además afrenta a millares de víctimas, por lo que exigimos de manera pública que se revoque la concesión de esta distinción a Álvaro Uribe y se haga un acto público de desagravio, en el que se reconozca el valor de tantas personas y organizaciones sociales quienes defienden con su vida la paz, los derechos humanos y las libertades fundamentales en Colombia.
Colectivo de Colombianos-as Refugiados-as en Asturias “Luciano Romero Molina”. Gijón, 17 de junio del 2016.
Firma para que Álvaro Uribe no reciba la Medalla de Honor de la UIMP