Miradoriu.
De acompañamiento a los Pueblos Indígenas Organizados. Pensamiento, sentimiento y fuerza.
Qué futuro soñamos y cuál camino seguir
Acompañamiento a los Pueblos Indígenas en su camino de Reconstitución territorial, política, económica y cultural identitaria de los Pueblos Originarios Indígenas, enmarcados en los valores de equilibrio con la Madre Tierra / Pachamama / Ñuke Mapu, en base al respeto de la diversidad plurinacional del Abya Yala; a partir del reconocimiento y ejercicio de los derechos colectivos como Pueblos; en alianza con los movimientos sociales; para la transformación de los Estados Uninacionales hacia Estados Plurinacionales, Sociedades Interculturales y la superación de toda forma de explotación, opresión y exclusión.
Apoyo y aprendizaje de las alternativas para el Vivir Bien (Allin Kawsay en Quechua, Sumaq Tamaña en Aymara, Intro Fuil Moguen en Mapudugun-Mapuche); que revaloriza los principios de la cosmovisión indígena; ejerciendo los derechos colectivos en lo territorial, político, cultural y espiritual; que impulsa la integración del movimiento indígena del Abya Yala; que desarrolla alianzas con todos los sectores sociales excluidos e incide en los procesos internacionales desde los derechos de los Pueblos.
Defensa de la Tierra, Territorios y Unidad con la Madre Naturaleza.
(Pueblos Indígenas y Territorios somos uno solo)
Defensa de la intangibilidad y continuidad de los territorios indígenas frente a las agresiones de las industrias extractivistas.
– Los pueblos deciden el tipo desarrollo y no los capitales saqueadores. Suspensión de los proyectos extractivos de minería, hidrocarburos, forestales, pesca, agua, concesiones marítimas que saquean los recursos , a espaldas de los Pueblos; hasta cumplir con el Convenio 169 sobre la consulta previa, libre e informada, y el consentimiento respectivo.
– Garantías para las Tierras y Territorios y la seguridad jurídica del territorio ancestralmente constituido.
– Convenios internacionales en los países andino-amazónicos para hacer respetar los derechos indígenas y del territorio y recursos naturales.
– Propuestas regionales que garanticen el resguardo de los recursos naturales para los pueblos indígenas y la aplicación del derecho a la consulta previa.
– Estudio de los impactos en la salud, producción, economía, hábitos de consumo de los productos e insumos importados y de los alimentos manipulados genéticamente.
– Retiro de las empresas transnacionales que se enquistan en los territorios indígenas, expoliándolos contaminándolos y destruyendo para siempre a la madre tierra.
– Jornadas comunes de movilización internacional simultánea.
Recuperación, nacionalización y democratización del aprovechamiento de los recursos naturales renovables (bosques, biodiversidad, agua) y no renovables (petróleo, gas, minerales) en alianza con otros movimientos sociales.
– Respeto a la soberanía de los países andino-amazónicos ante la ofensiva neocolonial del imperio y respeto a la autonomía de los pueblos indígenas y comunidades.
– Estudio de los impactos en la salud, producción, economía y hábitos, de los productos e insumos importados, que sustenten la defensa de las producciones nacionales latinoamericanas.
– Promoción de los productos orgánicos y originarios y sus propiedades nutricionales para mantener los sistemas tradicionales de los pueblos indígenas, que sustentan la defensa de la producción nacional.
– Iniciativas económicas comunitarias indígenas, para el uso sostenible de los recursos naturales, con un manejo integral, equilibrado y complementario de los usos nutricionales, productivos, medicinales, bioindustriales, artesanales y turísticos, orientado a la autosostenibilidad de comunidades y organizaciones.
– Profundizar en las estrategias y promoción de capacidades para el desarrollo con identidad.
– Desarrollo de intercambios comerciales internacionales indígenas, de productos complementarios en el marco del comercio justo y solidario entre los pueblos.
Rechazo a la mercantilización de la Madre Tierra y privatización de recursos, como el agua, recuperando el carácter Inalienable, Inembargable, Imprescriptible e Intangible de los Territorios.
– Acciones de lucha frontal contra la firma de los tratados comerciales de ALCA y TLC.
– Elaborar y construir propuestas de Vivir Bien (llamado “desarrollo integral”) a partir de conocimientos y tecnologías propias.
– Administración equilibrada de los recursos naturales, creando instancias de seguridad jurídica para los productos (quinua, medicina ancestral), con patentes a nombre de los pueblos indígenas y originarios.
Fortalecimiento de nuestros propios sistemas de producción e intercambio de los pueblos indígenas; de desarrollo con identidad y nuestra relación con los sitios sagrados y recursos naturales existentes.
– Desarrollo de la economía originaria indígena, basada en los derechos colectivos, con tecnología adecuada, en armonía con la naturaleza y reduciendo la dependencia económica.
– Reestructuración de la Iniciativa de Integración Regional Sudamericana (IIRSA). Reorientación en base a la consulta y consentimiento previo, libre e informado, de los Pueblos y ciudadanía, donde se garantice la integridad e intangibilidad territorial de los Pueblos.
– Que los ejes multimodales de la IIRSA que atraviesan Sudamérica con programas de conexión carretera, energética, hidrovías, comunicacional, no terminen favoreciendo solo a los capitales exportadores, y se eviten sus impactos de traslado de poblaciones, etnocidio de Pueblos en Aislamiento Voluntario, destrucción de usos productivos locales y degradación de la Madre Naturaleza.
– Recuperación, vigencia y respeto de los cultivos tradicionales, los sitios sagrados y lugares arqueológicos que pertenecen a los Pueblos Originarios Indígenas.
– Administración y recuperación de los sitios sagrados y arqueológicos en base a la aplicación de los instrumentos que protegen los derechos colectivos.
– Restitución de los lugares sagrados absorbidos por la iglesia católica.
– Declarar a la sagrada hoja de coca como patrimonio de los pueblos originarios e indígenas y respeto a los derechos de usos milenarios.
Construcción de Estados Plurinacionales y Sociedades Interculturales
(Para todos, todo… Ningún Derecho solo para los indios)
Profundización de la concepción de Estados Plurinacionales y Sociedades Interculturales en base a los principios de equilibrio en igualdad de condiciones, rotación, reciprocidad y redistribución.
– Garantizar la transmisión intergeneracional de la cultura a fin de evitar la desestructuración cultural comunitaria.
– Construir “poder comunitario” a partir de la reafirmación de los valores de identidad y la formación política e ideológica de liderazgos, que incluya a la niñez, juventud, mujeres y adultos mayores.
– Rescatar, revalorizar, estudiar, sistematizar, socializar y difundir las experiencias de ejercicio de auto-gobierno de las comunidades y pueblos indígenas.
– Impulsar las refundaciones nacionales de los Estados andinos, como Estados Plurinacionales que incluyan a los Pueblos, en base a los principios de equilibrio en igualdad de condiciones, rotación, reciprocidad y redistribución.
– Desarrollo de la concepción de la autodeterminación indígena, en armonía con el respeto a la unidad en la diversidad de los movimientos sociales.
Conformación de Asambleas Constituyentes con representantes desde los Ayllus, Comunidades y organizaciones sociales, superando la corrupción del sistema partidario y electoral tradicional.
– Bajo la crisis actual del sistema neoliberal, consolidar los procesos de cambio estatales, con políticas a favor de las demandas de los pueblos indígenas y otros sectores de la sociedad.
– Construir respaldo político a nivel nacional y regional para garantizar en el largo plazo los procesos de cambio nacionales, desde los espacios de articulación de los pueblos indígenas y la sociedad.
– Sensibilización de otros sectores sociales para involucrarlos en las luchas indígenas; superando los estereotipos sobre los pueblos indigenas y afirmando el reconocimiento a su credibilidad.
Nuevas constituciones políticas de Estados Plurinacionales, elaboradas con la participación de la representación indígena y popular nacional.
– Impulsar la incidencia política y diplomática por parte de los líderes indígenas.
– Acciones conjuntas de las organizaciones indígenas con los presidentes y/o representantes de los gobiernos, aprovechando coyunturas específicas favorables.
– Construir respaldo político a nivel nacional , regional e internacional para garantizar en el largo plazo los procesos de cambio desde los espacios de articulación de los pueblos indígenas y la sociedad.
– Priorizar en las agendas políticas nacionales las demandas de los pueblos indígenas y otros sectores sociales, consolidando alianzas con gremios, sindicatos, instituciones solidarias y otros sectores de la sociedad civil.
Construcción de bases sociales hacia los Estados Plurinacionales y Sociedades Interculturales con enfoques de complementariedad, reciprocidad, redistribución y rotación.
– Construir poder de los pueblos y comunidades, reafirmando valores de identidad y la formación política e ideológica, y de liderazgos incluyendo a la niñez, juventud, mujeres y hermanos mayores.
– Recuperación de las tierras comunitarias como base para la reconstitución de los Pueblos, y con los principios de reciprocidad, complementariedad, igualdad, redistribución y solidaridad.
– Políticas Públicas y de Estado efectivamente interculturales. Que se elaboren y apliquen con base a la Plurinacionalidad y las adecuen a las particularidades culturales.
– Que los idiomas sean oficiales y que los valores, espiritualidades y demás prácticas culturales, sean respetados en los ministerios, centros policiales, juzgados, escuelas, hospitales, y cualquier otro espacio público.
– Medios de comunicación indígenas. Derecho a contar con medios, espacios e instrumentos de comunicación, incluidas las líneas satelitales, bajo conducción de las organizaciones indígenas.
– Paz en las fronteras y desde las escuelas. Requerir currículas educativas comunes en los países que recuperen los valores de hermandad y de derechos de los pueblos indígenas fronterizos.
Construcción de programas y proyectos políticos de los Pueblos Originarios Indígenas para el desarrollo de Estados Plurinacionales y Sociedades Interculturales.
– Capacitación de líderes indígenas desde el punto de vista indígena originario con la participación de las Autoridades Originarias y líderes de los Ayllus, Markas, Suyus, Cabildos y Comunidades.
– Motivar y liderar la construcción de propuestas para todos los sectores sociales, no solo para el movimiento indígena. Establecer criterios de alianza con otros sectores sociales en procura de la construcción de propuestas de país, de sociedad y de gobierno.
– Desarrollar espacios de articulación aprendiendo de experiencias de coordinación y trabajo con otros movimientos populares, como las del COINCABOL en Bolivia; la Convergencia Afro, Campesina e Indígena en Colombia; del Foro de Organizaciones Campesinas e Indígenas en Argentina; y del Frente Nacional por la Asamblea Plurinacional Constituyente en Ecuador.
– Posicionar un bloque político programático que desarrolle propuestas, programas y políticas indígenas de transformación social con visión del Abya Yala, a partir de las iniciativas de las organizaciones nacionales al respecto y del interaprendizaje entre ellas.
Implementación de Derechos Colectivos de los Pueblos Indígenas
(¿Que el Estado nos “dé una mano” o nos quite sus dos manos de encima?)
Promoción y aprobación de la Declaración Universal de los Derechos de los Pueblos Indígenas en cada país
– Apoyo al Cabildeo e incidencia en procesos internacionales, en especial los del Grupo de Trabajo de Pueblos Indígenas en la ONU, participando con delegaciones elegidas por las organizaciones y con propuestas propias y socializadas por ellas.
– Responder a las maniobras anti-indígenas en la ONU y otras instancias mundiales.
Impulso de la ratificación del Convenio 169 de la OIT, su desarrollo normativo nacional y vigilancia de los informes sobre de su cumplimiento en todos los países.
– Iniciar el desarrollo y reglamentación legislativa del Convenio 169-OIT en los diferentes Estados , incluido el español.
– Promover la vigencia de la consulta previa, informada, pública, en lengua propia, mediante las organizaciones, y al consentimiento previo, sobre toda norma o proyecto sobre los territorios.
– Demandar la voluntad política estatal para aplicar el Convenio 169-OIT. Que la consulta, territorialidad, propio desarrollo, educación y salud interculturales, entre otros de sus principios, estén por encima de los grupos de poder. Esto implica la adecuación intercultural de las leyes nacionales específicas a dicho Convenio; así como su ratificación en los demás países que no lo han hecho.
Desarrollo de la libre determinación de los Pueblos Originarios Indígenas, de su autoafirmación colectiva, autonomía en su organización y gobierno, a través de nuevos contratos sociales nacionales.
– Difundir el objetivo político de autodeterminación de las naciones originarias, difundiendo las experiencias adquiridas y visibilizando la situación de los pueblos indígenas.
– Garantizar formas de transmisión intergeneracional de la cultura a fin de evitar la desestructuración cultural comunitaria.
– Promover el ejercicio de todos los cargos públicos en las localidades, por parte de indígenas originarios que conozcan la realidad y tengan respaldo de los pueblos.
– Desechar las formas hegemónicas en las dinámicas organizativas.
Vigencia de los derechos a la diferencia cultural, identidad, salud intercultural, medicina indígena, patrimonio Intelectual y demás derechos colectivos.
– Recuperación y socialización de los conocimientos, sabidurías, tecnologías indígenas, sin las trampas del pensamiento colonial occidental. En esa dirección, fortalecer a los mayores y ancianos, darles espacio en los procesos y organizaciones, y promover Universidades Indígenas.
– Desarrollo de actividades para la recuperación, revalorización, socialización, profundización y potenciación de los conocimientos de los pueblos indígenas.
– Impulso a los demás derechos colectivos y consuetudinarios: Libre determinación, autoafirmación y continuidad como Pueblos. .Autonomía en las formas propias de organización y gobierno. Ejercicio de la medicina tradicional. Consulta y consentimiento en la elaboración de leyes y para la explotación de recursos naturales.
– Construcción de un sistema jurídico con la participación desde los pueblos indígenas.
Reconstitución de las autoridades originarias según cada pueblo indígena, respetando la diversidad.
– Formación y capacitación de líderes y autoridades indígenas, mujeres, jóvenes, niños y hermanos mayores, al interior y como parte de las propias luchas y acciones.
– Fortalecer y dar mayores espacios a los hermanos mayores y ex dirigentes, para dar continuidad a las lecciones aprendidas y profundizar las propuestas.
– Promover las Universidades Indígenas Interculturales que formen profesionales y técnicos indígenas especializados y con la cosmovisión de los pueblos.
– Fortalecer los programas estatales de educación intercultural bilingüe.
– Impulsar la educación y discusión en las comunidades, con temas de coyuntura, historia participación e identidad.
– Jornadas comunes de movilización internacional simultánea en todos los países . Por ejemplo, el 12 de octubre sobre las demandas de los pueblos indígenas.
– Promover mayores espacios, para la participación y protagonismo de las mujeres como dualidad y complementariedad.
– Consolidar las organizaciones de base y el proceso de unidad indígena en cada país, para superar el surgimiento de organizaciones anexas a las políticas sociales de los gobiernos que desarrollan paternalismo y divisionismo.
– Promover el autofinanciamiento de las organizaciones. Inicialmente trabajando con proyectos ante la cooperación internacional, pero incentivando desde las bases el autofinanciamiento.
– Apoyo a la constitución de un sistema de información y comunicación propio, que incluya la radio y televisión, a partir de consolidar las experiencias de las organizaciones indígenas en cada país . Que incluyan redes comunicacionales indígenas, con profesionales identificados con los pueblos indígenas originarios, para comprometerlos con la causa, a través de trabajos voluntarios, ayuda profesional y otros espacios permanentes de vínculos.
Impulso de la Coordinadora Continental de Pueblos Indígenas de Abya Yala, con los principios de legitimidad, representatividad, territorialidad, equidad de género y unidad en la diversidad.
Desarrollar la legitimidad y las alternativas en la incidencia política internacional del movimiento indígena
(Un solo pensamiento, un solo sentimiento, una sola fuerza)
Afrontar los diversos procesos internacionales de cooptación y división dirigencial inducidos desde el exterior del movimiento indígena.
– Afrontar los diversos procesos de cooptación de dirigentes, fortaleciendo las organizaciones, y la elección y control de representantes ante foros e instancias internacionales. No permitir que las ONGs los reemplacen ni delegar a especialistas en la toma de decisiones que les afectan.
– Ante el divisionismo y paralelismo inducido desde los gobiernos, profundizar la mayor interlocución de las organizaciones indígenas con el Estado y la sociedad, desarrollando propuestas de diversos temas nacionales y locales, que las posicionen y consoliden.
– Incidencia y denuncia ante las acciones de interferencia de empresas y organizaciones internacionales, para dividir, manipular o cooptar dentro del movimiento indígena.
Desarrollar una representación legítima de nuestros pueblos en los procesos nacionales e internacionales, con delegados elegidos y controlados por los pueblos, que desarrollen propuestas sobre nuestros derechos.
– Cabildeo, incidencia y participación en procesos internacionales, con delegaciones mandatadas por las organizaciones; desarrollando propuestas propias y asegurando la autofinanciación para la participación independiente.
– No permitir que la representación de los Pueblos y organizaciones indígenas sea sustituida por otras entidades; ni que los líderes o dirigentes sean reemplazados por técnicos en la toma de decisiones.
– Socialización de la Declaración Universal de Derechos de los Pueblos Indígenas en las comunidades y organizaciones indígenas locales , nacionales e internacionales.
No criminalización de las demandas indígenas y desmilitarización de nuestros territorios
(No arrancarán nuestras raíces… Volveremos y seremos millones)
Alianzas y campañas por la desmilitarización y no criminalización de la defensa de derechos de los pueblos indígenas.
– Promover la cohesión organizativa indígena y buscar alianzas con otros gremios y/o sectores de la sociedad civil para frenar la represión, criminalización y militarización, y denunciarla ante los organismos internacionales.
– Superar la promoción (escuelas, autoridades, medios) del enfrentamiento en las fronteras y el no respeto a la unidad entre pueblos indígenas transfronterizos. Promover currículas educativas comunes que recuperen valores de hermandad y de derechos entre dichos pueblos.
– La integración entre Pueblos y entre Estados no puede estar interrumpida o alterada por la presencia de bases militares en territorios indígenas. La paz y la integración en zonas fronterizas exige aplicar los Convenios internacionales como el No.169-OIT (pueblos transfronterizos), el de los Trabajadores Emigrantes (ONU-1990) y sobre Tráfico de Seres Humanos (No.49-OIT).
Documentación de casos y sensibilización hacia el interior de las organizaciones y opinión pública internacional.
– Documentar los casos de la criminalización de las luchas, en particular los que ocurren en Colombia y Chile por su mayor gravedad.
– Promover el respeto a las formas ancestrales de vigilancia, seguridad y administración de justicia.
– defensa internacional en los casos más graves de represión, persecución y criminalización de las demandas indígenas, en coordinación con las organizaciones involucradas.
– Activa unidad y solidaridad regional como respuesta a las políticas represivas y de criminalización de la lucha indígena.
Miradoriu internacional y misión diplomática indígena para denunciar y detener la criminalización y represión.
– Sensibilización a la opinión pública y cooperación internacional para conformar misiones de auditoría independiente sobre las denuncias de represión y criminalización señaladas.
– Conformación e implementación de misiones de auditoría, por entidades de prestigio internacional y en coordinación con las organizaciones indígenas nacionales.