El Sindicato de Trabajadores agrícolas de Sumapaz extiende un saludo fraterno e internacionalista proletario al campesino de Sumapaz, Organizaciones defensoras de DDHH, y decimoquinta delegación asturiana de verificación de los derechos humanos en Colombia, hoy presentes en esta asamblea campesina
Erasmo Valencia: “Todo viene de la tierra, y todo vuelve a la tierra, luego, sólo la tierra merece que se luche heroica y desesperadamente por ella hasta vencer o morir en su demanda, y nosotros los agrarios estamos decididos a ello”.
Sumapaz 2 de marzo.
Se presenta muy formalmente el orden del día, se asume, se cantan tres himnos, la internacional, el nacional colombiano , y el del sindicato Sintrapaz, se saluda y pone contexto por parte del vicepresidente del sindicato agrario (rechazando la militarización de más de un soldado por habitante, cuando ..¿si hay ya firmada la paz, porqué este exceso de militares?, y trasladando la postura sindical de rechazo a la pretensión de colocar dos estaciones de carabineros, pues eso contradice la tradición autogestionaria de la zona, donde los pobladores con Sintrapaz resuelven sus problemas, administran justicia, y esta presencia policial únicamente traería “enseñanza de delincuencia” en una zona donde no existe,, o la cultura de la competencia y el individualismo..), y después invitan a todos los 8 integrantes de la delegación astur a compartir apreciaciones..
Comparten también espacio docentes que trabajan lo sicosocial con menores con enfoque de paz, y se proyectan dos videos, sobre represiones sufridas en Sumapaz por parte de los militares (SiembraVientos), y sobre la propuesta de creación de la Zona de Reserva Campesina, asunto para el que convocan una amplia Asamblea en mayo.
“Saludo Cordial a nombre de la XV Delegación asturiana. Gracias por acogernos en este territorio de resistencia campesina, de reclamo histórico de reforma agraria, con nombres como Gerardo González, como Juan de la Cruz Varela.
Hoy es un día que emparenta también con otras latitudes y con luchas similares: un día como hoy, hace tres años, estaban asesinado a Berta Cáceres en Honduras. El mismo día estaban asesinando a Armando Pérez Iriarte en San Onofre. Estuvimos esta semana con su hijo, que denunció el asedio y las amenazas que padece la familia por exigir justicia.
Berta Cáceres, indígena lenca, defendía el río Gualcarque, igual que ustedes defienden los ríos que nacen en Sumapaz. Armando era reclamante de tierras, en una zona como San Onofre donde hay 84 exhumaciones o fosas del horror paramilitar al servicio de los latifundistas.
Los DDHH los violan en todas partes, en América Latina domingo, lunes y martes.. cantaba Víctor Jara en la zamba del Che..
En nuestro país el presidente de Amnistía Internacional ha dicho que por primera vez tras la II Guerra Mundial se viola el consenso de que todos los seres humanos nacemos libres e iguales en dignidad y derechos.
Ese consenso La Declaración de DDHH de 1948) nació tras el holocausto nazi de comunistas, antifascistas, gitanos, homosexuales, judíos, y los 50 millones de muertos de la Guerra.
Por supuesto que después se siguieron violando los DDHH en todo el mundo, pero ningún gobierno democrático los cuestionaba.
AHORA SÍ : ahora se demonizan colectivos de personas refugiadas tachadas de terroristas, inmigrantes a los que se criminaliza, mujeres y sus derechos negados, pueblos indígenas o negros, y se vuelve al concepto nazi de proteger a los humanos de los infrahumanos que dijera Goebbels.
Y lo hacen gobiernos democráticos, no dictaduras. Como muestra mayor EEUU y su peligroso presidente.
O como en Brasil. Por eso el Movimiento de los Sin Tierra (frente al peligro Bolsonaro, racista, misógino, fascista, que odia a las mujeres) ha declarado tiempos de Resistencia.
O como en Argentina, y por ello hay una movilización continuada, incesante, de rechazo a las medidas para ricos de Macri.
Como en Chile, donde las leyes y la constitución pinochetista sigue vigente.. pero donde el pueblo mapuche ha resuelto actuar para recuperar territorios , algo parecido a lo que ustedes hicieron en Sumapaz.
Como en Europa donde hay un retroceso en materia de Derechos, auge del racismo, ataques a los derechos de las mujeres (pese a lo cual se prepara una huelga fuerte para el día internacional de la mujer trabajadora), leyes laborales que aprietan aún más a las clases trabajadoras para dejar más y más ganancias al patrón..
Estamos en territorios de resistencias campesinas y al trasladar nuestro saludo fraterno les queremos compartir que hay una 15 delegación asturiana que ya ha sido acogida varios años en este espacio donde tratan de avanzar en la construcción de Zona de Reserva Campesina en la que vienen trabajando desde 1998.
Ojala que la persistencia organizada de ustedes logre este propósito, esa construcción y figura legal colombiana de economía campesina.
Hemos conocido cómo la Vía Campesina Internacional, o la CLOC, ha conseguido avanzar propuestas de dignidad campesina, de luchas campesinas, del concepto y la práctica de la Soberanía Alimentaria y de la alimentación sana.
Ustedes son Vía Campesina a través de Fensuagro, y por lo tanto, además de guardianas/es del páramo, de los frailejones, son auspiciadoras/es de medidas grandes, potentes, ambiciosas, para tratar de darle vuelta al cambio climático que el capitalismo y su agricultura industrial han exacerbado.
La Vía Campesina que ha tenido en diciembre otra gran victoria, tan ocultada en los medios de todo el mundo como se oculta el exterminio social en Colombia: la aprobación en la ONU de la Declaración de Derechos del campesinado, 20 años después de que se empezara a proponer.
Unos derechos específicos que complementan los DDHH y que han tenido la oposición de las transnacionales del agronegocio, y por eso mismo ni el gobierno de Colombia ni el gobierno español han votado a favor.
Al no apoyar esos Derechos del Campesinado, y colocarse al lado de los terratenientes y del capitalismo agrario, tampoco esos gobiernos español y colombiano ponen condiciones para defender integralmente los DDHH.
Hay consenso sobre la evidencia de que el extractivismo es el mayor causante de violaciones a los ddhh en todo el mundo. Allí donde hay un proyecto extractivo se mata, se contamina, se rompe la aspiración a la democracia social.
Cundo cerraron las compuertas en HidroItuango, cuando se volvió a romper una balsa de lodos tóxicos en Brumadiño-Brasil, con 176 personas muertas y 130 más desaparecidas, cuando las megamineras, casi todas extranjeras, rompen territorios, quiebran comunidades, se apropian de los acuíferos, cuando las petroleras violentan el permiso, la consulta previa-libre-informada-consciente, cuando las represas inundan territorios y destruyen la Memoria, cultural, de vida, incluso la memoria de las masacres provocadas para construir esas represas como en HidroItuango, como en Urrá (Kimy Pernía) , y en tantas otras.. en todos los casos de extractivismo se exacerba la violencia contra las personas, las comunidades, la naturaleza.
Y por ello es allí donde también se producen las RESPUESTAS, las alianzas, los movimientos, que ojala pudieran tener mayor coordinación, mayor aprendizaje mútuo, una INTERNACIONAL de las resistencias, que en parte ya realiza la Vía Campesina Internacional en la defensa y construcción de la soberanía alimentaria.
El extractivismo vulnera el derechos de las mujeres ahora que estamos en vísperas del 8 de marzo.
Al extractivismo y sus responsables, incluidos muchos gobiernos progresistas que no han sabido salirse de la inercia perversa del desarrollismo, parece que sí se han sabido contraponer Movimientos, Ríos Vivos, Foros PanAmazónicos como el que este año iba acelebrarse en Leticia, pero lo han cambiado para 2020 en Mocoa, aquí en Colombia,
Alianzas, redes, articulaciones, que ojala pudieran fortalecerse como la mejor forma de defender los DERECHOS universales
como están haciendo ustedes creando la Zona de Reserva Campesina que se contrapone al latifundismo y su depredación, al acaparamiento de tierras, al agronegocio, destructor de la naturaleza,
y en cambio posibilitarán, en clave de Resistencia y construcción de reforma agraria, la comidita sana y la soberanía alimentaria que influirán en la Soberanía Popular de los Pueblos.
Nuestros Agradecimientos.
ASAMBLEA CAMPESINA PARA LA DEFENSA DE LOS DERECHOS HUMANOS EN LA ZRC DE SUMAPAZ
“Todo viene de la tierra, y todo vuelve a la tierra; luego, solo la tierra merece que se luche heroica y desesperadamente, por ella hasta vencer o morir en su demanda y nosotros los agrarios estamos decididos a ello”
Erasmo Valencia
El Sindicato de Trabajadores agrícolas de Sumapaz extiende un saludo fraterno e internacionalista proletario al campesino de Sumapaz, organizaciones defensoras de DH y décimo quinta delegación asturiana de verificación de los derechos humanos en Colombia, hoy presentes en esta asamblea campesina.
El territorio Campesino de Sumapaz, hoy Localidad 20 de Bogotá DC, históricamente aislado, segregado y estigmatizado por la condición imperativa de la lucha por la tierra y la consecuente derrota del latifundio en estas altas montañas en la primera mitad del siglo XX; aún en este siglo seguimos exigiendo el reconocimiento como sujetos de derechos sociales y políticos. Este evento se constituye en un avance significativo en este propósito emancipador.
El territorio Sumapaz debe ser sujeto de la reparación colectiva como víctima del conflicto social y armado que ha sufrido en todas las épocas de la guerra desarrolladas en este país a partir del siglo XX. En esta materia se deben restaurar todos los derechos que se le fueron negados y vulnerados a la población, incluido el derecho a la vida aunque parezca obvio y a la libertad, demostrado lo anterior en la infinidad de tragedias vividas y denuncias hechas.
Un aspecto conexo a lo anterior clamado por la población, es el de garantizar el derecho constitucional a contar con la administración local en y para el territorio con sedes al interior del mismo. Considerar que a Sumapaz D.C, se puede administrar desde el sector urbano de la capital, es causa de muchos de los males que padece hoy la localidad de mayor extensión territorial y suprema riqueza ambiental y cultural de Bogotá y del interior del país.
Consiste entonces en cumplir con lo estipulado en el acuerdo 09 de 1986 promulgado por el Concejo de Bogotá y firmado por entonces alcalde mayor Julio Cesar Sánchez crea la “Alcaldía Menor Rural Sumapaz” con sede en San Juan de Sumapaz. Acuerdo que después de tres décadas se ha incumplido e incluso modificado en la mayoría de su articulado por obvias razones e intereses políticos ajenos a los del campesinado y demás trabajadores de la localidad. Hoy, en esta materia después de la promulgación del decreto 1421 del 1993, avanzamos en el consenso comunitario y político de exigir el cumplimiento del artículo primero “créase la alcaldía menor rural de Sumapaz con sede en el corregimiento de San Juan…” y reconocidas las características dispersas del territorio ha de considerarse la sede alterna en la cuenca del río Blanco.
El tema crucial y álgido de los derechos políticos y sociales tiene que ver con la condición de Sumapaz localidad y región en materia de ordenamiento territorial, en este particular tenemos claro que el orden que se impone es de la adecuación de este territorio estratégico para la extracción indiscriminada de las riquezas por medio de proyecto MINERO ENERGETICOS, en el cual, no se consulta ni se tiene en cuenta la opinión de la población habitante, dejándonos apenas la alternativa de sumarnos a las acciones de los pueblos en la nación y en la región, en donde municipios como Cabrera y Fusagasugá, Arbeláez, rechazan a través de la consulta popular la posibilidad de la exploración y explotación de hidrocarburos y para el caso de Sumapaz D.C, exigimos el respeto y la financiación de los postulados de los planes de desarrollo sostenibles formulados por y para la Zona de Reserva Campesina Sumapaz y del Plan de Manejo Ambiental y Productivo propuesto por otra parte de pobladores de la localidad, en todo caso, iniciando por el reconocimiento de estas figuras de ordenamiento legítimas y legales estipuladas en la ley.
Más de 110 días han transcurrido de la histórica aprobación de los “ derechos del campesino y demás trabajadores(as) de zona rural” hecha por la asamblea de la ONU, el 29 de octubre de 2018, esta, después de más 20 años de lucha constante y decidida por parte de la vía campesina y demás organizaciones campesinas del mundo; se cuenta con una herramienta fundamental para la exigibilidad de los derechos vulnerados y la restauración de los mismos en este territorio,
acá el Concejo capitalino tendrá una oportunidad también histórica, con el hecho de saber que el 80% de los 821 millones de seres humanos que padecemos el hambre y la marginación en los Estados del mundo, habitamos el campo y a pesar de esta temeraria cifra reconocida, el 70% de los alimentos que consume la humanidad actualmente los producimos con devoción los campesinos y campesinas e incluso en los países explotados ascendemos a producir el 80% de la alimentación que sostiene a los pueblos en estas regiones.
El campesinado que habita el territorio rural de Bogotá, en las localidades que POT configura, exige mínimamente el desarrollo de la declaración que entre otros aspectos el reconocimiento como sujeto de derechos y especial los derechos políticos nos permite incluso proponer la interlocución directa y la vocería auténtica con la administración y en los espacios de participación.
De esta manera los temas críticos de la movilidad, la salud, educación, protección social, servicios públicos domiciliarios que han presentado y presentan una situación precaria y preocupante ampliamente expuestos en espacios de discusión como la reciente audiencia liderada por la contraloría local en 24 de noviembre de 2018, con asistencia de varias de las entidades y la decidida representación comunitaria; deberán ser atendidas por la administración distrital y resueltos en contexto y en favor a los intereses y necesidades de la población campesina raizal y residente, evitando que se imponga definitivamente que los contratistas sean los principales beneficiados con la ejecución presupuestal en la localidad como sucede en la actualidad y año tras año sin dar solución de fondo a la aguda crisis por la que atraviesa el campesinado.
Cada uno de estos renglones ameritó un pliego amplio para discutir y negociar con los sectores de la administración distrital y nacional que intervienen en la localidad:
Lo anterior se resumió en el pliego MIA Sumapaz, con motivo de la Desobediencia Civil declarada 2013, pliego que al día de hoy no se resuelve en lo esencial, por el contrario aparecen elementos nuevos a resolver.
Implementación de Acuerdos, Seguridad y Convivencia.
El territorio debe ser reconocido como víctima colectivo del conflicto, reparación colectiva y garantía de no repetición.En el tema de seguridad las propuestas van desde las hechas por la administración Local en cabeza de Liliana Murcia Díaz, imponiendo junto a la administración Distrital la instalación de dos (2) estaciones de carabineros de la policía en los corregimientos de Nazareth y San Juan y se resumen en las medidas coercitivas y de fuerza pública, en manos del ejército Nacional de Colombia, hoy en Sumapaz existen 3000 efectivos militares acantonados en un batallón y en una base militar patrullando la localidad y violando los DH y DDHH en casos como:
Amenaza Individual (Código A 15) y Amenaza Colectiva (Código A 18): Manifestación de violencia contra una o contra un grupo de personas por parte de agentes directos o indirectos del Estado, que las colocan en situación de víctima potencial de agresiones contra su vida o integridad, afectando su estabilidad psíquica.
Existen amenazas contra SINTRAPAZ su dirigencia y afiliados, por parte de grupos paramilitares.
Empadronamiento del campesinado en los puestos de control militar.
Sobrevuelo de drones en esquemas de protección, manipulados por personal militar.
Inteligencia militar en manos de mendigos, y vendedores ambulantes, recorriendo correteras y caminos de la localidad.
EMPLEO DE MÉTODOS ILÍCITOS DE GUERRA
Pillaje (Código D95): Destrucción o apropiación ilícita, arbitraria, sistemática y violenta por parte de las fuerzas armadas en conflicto, de bienes de la población civil, no justificadas por necesidades militares.
Apropiación ilícita de un predio en la vereda de San juan de Sumapaz donde está instalada una base militar.
Hasta la propuesta de fortalecimiento del sistema de justicia, auto-vigilancia y control desarrollado históricamente por el campesinado, en el cual alternativamente, se orienta por la articulación de las tres (3) corregidurías existentes e incluso estudiar la atención puntual con esta entidad de gobierno hacia el Plan de Sumapaz, en donde la comunidad organizada formule y desarrolle el plan estratégico de seguridad y convivencia priorizando en lo preventivo.
Para los casos de atención puntual a hechos y/o delitos el sistema de justicia debe respaldar oportunamente la acción comunitaria y de inspección de policía para seguir los procesos necesarios que no estén en competencia local.
Movilidad Rural e Interconexión Vial con la Capital y la Región.
Iniciando con la superación del conflicto ambiental que supone la construcción y adecuación de la Troncal Bolivariana y demás vías en el territorio, las cuales a más de 80 años de la promulgación de la ley tercera, aún no cumple con el objetivo supremo de interconectar el centro con el sur del país y en el tramo de 100 km aprox. que recorren la cordillera en territorio Usme y Sumapaz; se transita en las condiciones que vivieron las vías del país hace más de un siglo.
Derecho a la salud para el campesinado y salubridad rural
El modelo de intervención en salud debe contar con el enfoque territorial y la financiación acorde a las exigencias del territorio.
Un hospital que con motivo del nuevo modelo y con él la integración en la sub red sur, abandona la estrategia de salud a la vereda, el traslado de pacientes hacia los hospitales de Tunal y Meissen hoy no cuentan con las ambulancias, ni con la prioridad para la atención, nos agudiza la condición de víctimas y hace reclamar el trato digno con la dotación de instrumentos en los centros de atención en salud en el territorio, el nombramiento de personal médico de planta y la ampliación del servicio hacia los sectores más apartados del territorio para dar cuenta del derecho que tienen los vecinos desprovistos estos en la época, de la más mínima garantía de salud por parte del Estado.
Educación e identidad cultural campesina
El proyecto de desarrollo educativo local debe contar con la pertinencia, es decir, la educación campesina estipulado tanto en la constitución como en la ley general de educación sin el desarrollo después de 5 lustros de su promulgación.
Los actuales colegios requieren de la refinanciación y la consolidación del proyecto hacia la garantía del derecho educativo desde la primera infancia hasta la educación superior para la niñez, la juventud y la adultez que aún no logra la nivelación académica ante el abandono de que fue objeto por más de 70 años.
Protección social del campesinado
Es el parlamento quien tiene que legislar derechos del campesinado como el derecho merecido de la pensión por dedicar la vida a la más digna y honrosa de las profesiones, la producción de alimento y la conservación de bienes ambientales antes que recibir un pago por servicios ambientales que puede ser tan exigua que nos hunda en la miseria.
En este camino el campesinado ha propuesto garantizarle a la extensión rural de Bogotá el subsidio a la producción sumado a la transferencia de tecnología para la producción limpia y los seguros de cosecha. Todo lo anterior incluido en los planes desarrollo alternativo tanto para la ZRC Sumapaz como los Planes de Manejo Ambiental y Productivo.
Servicios públicos domiciliarios
El agua potable, la red de energía eléctrica, las plantas PTAR y transporte público, exigen de un miramiento particular.
Inaudito que los habitantes del considerado páramo más grande del mundo[/bleu violet] y para nosotros centro de equilibrio cósmico, en pleno siglo XXI, no hayamos resuelto el consumo de agua potable, tampoco el regadío para la producción agroecológica y una de las culpas sea el desgreño contractual de la nación en proyectos que fracasaron y no han sido investigados, la empresa de energía eléctrica ENEL CODENSA hoy, debe ser llamada al control social por estos cabildos y veedores o en su defecto adelantar el estudio para la financiación del usos de energías limpias en el campo, el campesinado no soporta más el engaño y atropello al que hemos sido sometidos.
Hoy cuando la misma Federación Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria FENSUAGRO – FSM, denuncia ante la opinión pública, las organizaciones sindicales, populares y defensoras de DDHH nacionales e internacionales, los asesinatos y agresiones en contra de la integridad física de las comunidades campesinas, quienes se encuentran haciendo exigencia del cumplimiento de los acuerdos de paz, entre el gobierno y las FARC.
Alertamos y exigimos del Estado colombiano y de los organismos defensores de DDHH, la actuación para evitar incluso que el gobierno colombiano agudice la situación, participando como instrumento del imperio norteamericano en un eventual conflicto contra la hermana república de Venezuela.
SINTRAPAZ Y DEMÁS ORGANIZACIÓN SOCIAL DE SUMAPAZ DC
Asamblea Campesina y Popular ZRCS, San Juan de Sumapaz 02 de marzo de 2019