Safa
1-A salón lleno la Ciudadana-Cultural de Oviedo
Celebraba ayer conferencia en el Manglar con el oftalmólogo palestino Mohamed Safa,
y con su nuevo y tercer libro “La segunda Nakba” encima de la mesa,
con la introducción y presentación de la abogada Gemma Arbesú, recién llegada de Nueva York, de la sesión de descolonización de la ONU.
Y en torno a la colonización por asentamiento habló Safa, refiriéndose a los 75 años de colonia y ocupación, pero también al impresionante presente de bombardeos y destrucción llevada a cabo por sionismo, que tiene a la extrema derecha en el poder en Tel Aviv.
Mohamed Safa ya había compartido más veces que los dos grandes crímenes de lesa humanidad contemporáneos son.. el holocausto, que rechazamos con rotundidad, y la Nakba o desastre palestino propiciado por la límpieza étnica practicada por 75 años por el sionismo.
Pero que, mientras un israelí que renombre con frecuencia el holocausto es ensalzado y su estatus crece, a un palestino que rememore la Nakba se le ataca, y se pretende acallar su propuesta de justicia universal.
Ahora, con las bombas cayendo sobre hospitales, escuelas de la UNRWA, mezquitas e iglesias centenarias, y con la complicidad de EEUU y de Europa para que ese exterminio se lleve a cabo, asistimos de nuevo a la toma de partido de los medios de comunicación que “explican” las razones por las que un gobierno ocupante de hecho “tiene derecho” a defender se del ocupado.
El amo “tiene derecho” a machacar aún más al que ha esclavizado.
Y el derecho internacional construido con tanto esfuerzo es dinamitado por los hechos terribles de la ocupación ilegal, con Muros, con Vallas, con Apartheid, que se vuelven “asumibles” por la comunidad internacional.
Sin embargo Safa comparte que para la gente palestina ha supuesto un sacudón el que un pueblo en términos de sometimiento tan cruel y tan largo haya tenido la capacidad creativa de renovar sus resistencias, a las que tiene derecho y obligación como las tuvieron los franceses para oponerse al nazismo, o los ucranianos para resistir la entrada rusa, o los asturianos o los españoles cuando fueron invadidos por los franceses.
Los próximos días, aventura el doctor, serán peores, según la crónica sionista anunciada, con intentos de comprar al gobierno de Egipto para que “se quede” con otro millón de palestinos a los que obliguen a salir de Gaza, y con cuentagotas de apertura minúscula del bloqueo criminal, para que los gobiernos occidentales y árabes “reconozcan” de hecho la ocupación y sus consecuencias antihumanas.
Coloquio vivo con los asistentes, que han trasladado su vergüenza por la pérdida de humanidad de Europa, muchos de cuyos gobiernos se apresuran a colocarse del lado del sionismo, persiguen a los movimientos de ddhh, y alientan el genocidio con descaro.
A la pregunta del público sobre los “aliados” del pueblo palestino, Safa recuerda cómo han tratado a Iraq, a Siria, a Líbano, a Jordania. La invasión y destrucción de Iraq vuelve a la escena del Manglar en la memoria de cómo toda una civilización avanzada era destrozada con ferocidad, y cómo las personas palestinas allí refugiadas iniciaban una nueva y dramática diáspora: Safa nos recuerda de nuevo que los cinco mil científicos iraquíes fueron imposibilitados de seguir haciendo sus aportes en Siria y otros lugares árabes (condición impuesta por el sionismo), y muchos de ellos y ellas no se sabe si están secuestrados por Israel o por EEUU.
Safa, sin embargo ha seguido trasladando su confianza de que en medio del exterminio, de las matanzas, de la crueldad aberrante del ocupante, el pueblo palestino seguirá recreando su existencia, pervivencia y dignidad.
2-No es una guerra es un Genocidio.
Saludos Cordiales. (nota enviada a varios periódicos amigos).
Trasladamos nuestra inquietud porque en algunos diarios progres estén comprando la narrativa de «guerra Israel-Hamas», que más bien corresponde a otro tipo de prensa comercial adscrita al relato sionista.
Constatamos que en las importantes movilizaciones llevadas a cabo en Asturias (muy modestísimas respecto a las que se llevan a cabo en TODO el MUNDO), https://pachakuti.org/hoy-todas-somos-palestina/ donde además «han aparecido» multitud de jóvenes palestinos y árabes de la migración, la demanda y explicación elemental es que no se deje manipular la historia de la «ocupación por asentamiento» de Israel sobre la tierra de Palestina.
Que no se pretenda ocultar a Palestina y a su pueblo, ni favorecer de ningún modo la justificación de la teoría y práctica sionista de invisibilizar a Palestina y su derecho a la resistencia.
También el conferenciante de ayer explica en uno de sus libros:
«Nosotros siempre que hablamos de que hay dos tipos de colonialismo: el colonialismo clásico, aquel que surgió cuando había una súper producción, en el que Europa miraba a ultramar, para buscar zonas con mano de obra, mercado y materia prima, que era lo que necesitaba ese colonialismo, y luego hay otro tipo, que es el colonialismo de asentamiento, el que padecemos los palestinos. En un colonialismo de asentamiento se pasa, como dice Patrick Wolfe, por una lógica de eliminación, es necesario que el territorio donde se va a crear ese colonialismo de asentamiento esté vacío, y si no está vacío, hay que eliminar a los que hay allí.
Esta es la lógica de lo que ha pasado hasta ahora en todos los colonialismos de asentamiento, de hecho, Israel, para crear una concepción distinta, propuso aquel eslogan, el mejor marketing que hizo en aquel momento, cuando dijo “es una tierra sin pueblo, para un pueblo sin tierra”. Ya dio por hecho que Palestina es un territorio vacío, y por tanto negó nuestra existencia. ¿Cuál es la diferencia cuando se compara a Israel con Canadá, con Australia, con EEUU? Es que cuando llegó al territorio de Palestina, no estaba vacío, había un pueblo que tenía todos los elementos para formar una identidad nacional fuerte, tenía su cultura, su idioma, y densidad demográfica, que se comparaba con cualquier territorio en aquella época. Por tanto, el territorio no estaba vacío.
Entonces, para aplicar lo que ellos querían, es imprescindible la limpieza étnica, la expulsión de la mayoría de los habitantes nativos del territorio palestino para poder traer los colonos del resto del mundo, y así empezó el proceso cuando nos encontramos que más de 750.000 palestinos fueron expulsados en lo que se llama la primera Nakba, en 1948, y representaban, en aquel momento, el 75% de la población. Apenas ahora, de estos palestinos queda un 18% en Palestina. Este territorio fue colonizado por unos colonos nuevos al territorio palestino, pero para eso necesitaban hacer esa limpieza.
En una segunda fase, se inició un proyecto, que no cesa, es permanente, y sigue siendo hasta hoy día, de las colonias que se crean a base de confiscar territorio, asesinar a una familia palestina, y ocupar la mayor extensión territorial lo antes posible para el Estado de Israel.»
3-Antes, pocos días antes, la Universidad de Oviedo había tenido ocasión de profundizar en las causas y consecuencias de la colonización, en unas potentes jornadas celebradas durante tres días en el Milán. https://pachakuti.org/universidad-de-oviedo-hablemos-de-palestina-ocupada/
Y hace bastantes años, una de las exposiciones de fotos de Pachakuti, paseada por numerosos lugares asturianos, del fotoperiodista gallego Manuel Valcárcel, tenía por título “Palestina o la dignidad de la humanidad en juego”. ¿20 años después tiene o no vigencia dicho titular con la rabiosa actualidad del genocidio en Palestina?
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