Hola buenos días, hoy empezamos la mesa “Mujeres las más Desplazadas, las más refugiadas». En nombre de la Comisión Española dar gracias a Soldepaz, por la oportunidad que nos ha dado de compartir con estas mujeres dignas constructoras de paz, que además, nos van a animar a seguir en la difícil tarea de la defensa de los derechos humanos y de los derechos de la mujer. Antes de presentar a nuestras ponentes de hoy quisiera explicar lo que hace CEAR. CEAR lleva veinticinco años trabajando por la defensa de los derechos de los refugiados y del derecho al asilo en España. Ha venido defendiendo durante toda su existencia y defendiendo a todas aquellas personas, que se han visto obligadas a salir de su país de origen, porque están siendo perseguidas por motivos políticos, por raza o por pertenecer a un grupo social y evidentemente las mujeres están sufriendo permanentemente ésta persecución. Un crudo ejemplo de la actitud de los organismos competentes en materia de asilo, ha sido la reciente denegación de asilo de una mujer nigeriana. Fue mutilada en su país, vino huyendo porque iba a ser obligada a un matrimonio forzoso. El Ministerio del Interior negó la solicitud de asilo alegando que no estaba siendo perseguida, porque ya había sufrido la mutilación. Por lo que nos queda un largo camino por construir y por seguir en la lucha de derechos de las mujeres. Sin más os voy a presentar a nuestras compañeras de mesa. Por un lado tenemos a Alexandra Borga, representante del movimiento de los afectados por las represas de Brasil. Alexandra es estudiante de pedagogía, pertenece al movimiento de los afectados por las represas de Brasil. Hace cuatro años, ella y su familia se vio obligados a desplazarse a otra región, porque sufrieron los daños causados por la construcción de una represa. A partir de este momento se ha dedicado a informar a población de esta problemática, y poder exigir el respeto de los derechos de sus ciudadanos cercanos. Y por otro lado tenemos a Leonora Castaño Lozano, colombiana y presidenta de la asociación nacional. Con esta asociación lleva 17 años de una larga trayectoria, como defensora de derechos humanos y los derechos la mujer en el sector rural. Actualmente está acogida en el programa de protegidos internacional ya que salió de Colombia por amenazas y el peligro que corría su vida. Antes de fundar y reestablecer la asociación, participó en la asociación nacional de usuarios campesinos. El pasado año ganó el premio por la defensa de los derechos humanos de las mujeres otorgado por la organización de la morada de Chile.
HABLA ALEXANDRA BORGA
-Buenos días. Voy a dividir mi conferencia en tres momentos. En primer momento, hablar un poco de cómo está el país y las mujeres y en un segundo momento del modelo energético y en un tercer momento la propuesta que la organización está haciendo en relación con las mujeres. Brasil es un país que se localiza en América del Sur, con muchos millones de kilómetros cuadrados y 170 millones de habitantes. Podemos decir que Brasil es un país rico, en estado natural, que tiene mucha tierra, agua, Amazonia y una diversidad muy grande. A pesar de esas riquezas tiene una concentración muy grande. El 91% de los agricultores tiene el 29% de la tierra y en cuanto que el 9% de los agricultores tienen el 71% de la tierra hay una diferencia grande y ¿que existe para resolver esos problemas de la tierra? no tiene solución a una reforma agraria de mercado lo que estamos diciendo. La tierra se compra a los pequeños agricultores de la Amazonia, y entonces el gobierno legaliza esas tierras, para los pequeños agricultores y consecuentemente las venden para grandes latifundarios, o sea es una legalización de latifundios en la Amazonia. Esos grandes latifundarios devastan y matan y están plantando soja transgénica y otras plantas. La mayoría de las empresas que existen en Brasil, fábricas e industrias, son multinacionales, no son empresas brasileñas ni tampoco se quedan en Brasil para los brasileños. Los salarios son bajos, la mano de obra es barata .Las mujeres son aproximadamente el 52% de los habitantes. En general la mujeres tienen más estudios que los hombres. Tienen un salario 30% menos que los hombres. Hay una ley en Brasil que dice que las mujeres no tienen una fuerza de trabajo entera, o sea, si un hombre tiene una fuerza de trabajo una mujer equivale al 80% de la fuerza del trabajo del hombre, eso quiere decir que ellas no pueden tener el mismo salario que los hombres. Más específico es la construcción de represas por las hidroeléctricas. Pero está claro que es un país rico en hidrografía, tiene muchos ríos y gran capital internacional. Grandes empresas están incorporándose a Brasil en la construcción de esas represas de agua, para la generación de energía eléctrica. El discurso es que con eso llega el desenvolvimiento económico; por eso no se habla de los perjuicios y de los problemas que corren entre la población afligida por esas represas. Existen dos nuevas represas construidas, de esas un millón de personas fueron afectadas, por cada cien personas afectadas el 70% no llevaron ninguna indemnización por sus tierras, sus casas apenas se han ido edificaron en sus tierras, todo fueron excusas y no tuvieron ningún resarcimiento. Hoy existen 70 grandes represas proyectadas, algo que aproximadamente hace que sean muchas las personas afectadas por estas represas. En una perspectiva de que vengan a recibir indemnizaciones, cuando una empresa construye una de estas represas, es que se instalan en una región y hablan de que van construir una represa; y hay entonces un cierto miedo por parte de las personas de perder lo que tienen, sus tierras, sus casas y sus familias también. En muchos casos de familiares y hermanos padres hijos al construir una represa tienen que ir a vivir muy lejos de otros ser en estados diferentes. La construcción de una represa, vemos algunos casos, por ejemplo en el estado de Milesery la presa de Candunga recientemente, 50 familias vieron sus casas enterradas con tractores. Fueron muchas corporaciones de la policía para llevar estas casas y llevaron las familias de donde estaría construidas la represa de Candunga. Personas que no querían salir de sus tierras y la policía a esas empresas, si esas personas no quieren salir de sus tierras dicen que están contra el progreso. Entonces es necesario muchos corporaciones de policía, para retirar aparentemente a las personas que están sin un arma apenas dentro de sus casas; y la policía tiene mucho armamento es fácil de entender, parece que están lidiando con terroristas. La represa de Itá inundó toda la ciudad. En el caso de la represa de Masajino los afectados tuvieron un encuentro para decidir como resolverían sus problemas; y las mujeres estaban cocinando y la policía estaba sorprendida y les pedía sus nombres a las mujeres, a sus hijos y las procesó por estar haciendo eso, niños de 7,10,12 años. Un problema muy grande de prostitución de las mujeres, está en los locales donde son construidas las represas, los hombres que son trabajadores de esas empresas, son personas traídas de otras regiones, generalmente son personas que salen de las cárceles, criminales, bandidos, son los que van realizar el trabajo pesado y hago un llamamiento por parte de las empresas de que estos hombres si tuvieran relaciones sexuales tendrian un mayor rendimiento en el trabajo ;por eso facilitan casas de prostitución en los alrededores donde será construida la represa, para que estos hombres tengan sexo con las prostitutas. Las mujeres que tienen sus casas y tierras inundadas no reciben ningún tipo de recompensa por ello. Muchas de ellas son violadas en los alrededores de las construcciones. Tenemos casos por ejemplo en la represa de Barra Grand, donde hay un gran desastre medioambiental 2000 hectáreas de araucaria, la araucaria es una planta que está siendo extinguida, y esas 2000 hectáreas que son la segunda mayor densidad de araucaria, está siendo derribada para la construcción de esta central hidroeléctrica. Los afectados y afectadas están movilizandose para impedir esta construcción y algunas organizaciones ecologistas apoyan esta causa. Por eso la empresa insiste, en continuar derribando porque el 80% de la construcción de la represa ya está hecha con un muro. Después la construcción de estas represas producen muchos problemas en la familias, en la gran mayoría se quedan sin tierras forman Favelas en las ciudades, y la familias con sus mujeres e hijos que permanecen alrededor de los lagos y los ríos no tienen acceso al agua. También hay un desastre cultural,ver como se dispersan las familias para lugares diferentes, entonces pierden valores, raíces, costumbres. Nuestra organización trabaja con las mujeres y con sus hijos, la gente puede percibir que todos son afectados, pero las mujeres mucho más, porque sufren los abusos de género. Las prostitutas son las más perjudicadas. En cuanto a la organización tenemos hecho un trabajo conjunto con mujeres, hombres, con todos, no separamos ningún tipo de organización, por esto entendemos la problemática de género y discutimos conjuntamente los cursos y actividades. Para entender los problemas de las mujeres los hombres también tienen que entenderlos y escucharlos. Tenemos 16.000 familias asentadas, que son familias que la propia organización logró conquistar la tierra en otros lugares, en otras regiones para resarcirse de la tierra perdida. En cuanto a la organización 16.000 familias conseguimos otras tierras, y hay otras familias que estamos en proceso de amenaza de perder nuestras tierras, pensamos que más que el problema concreto de perder sus espacios, es una amenaza o un miedo a perder todo aquello que tienen, y por eso intentamos hacer un trabajo de rescate del ser humano en sí. La valoración del ser humano porque cultural y psicológicamente las personas son arrasadas. Las organización proponen ese trabajo conjunto de mujeres, junto con hombres y sus hijos. Entendemos que el problema de género no es un problema solamente de las mujeres, es un problema de la sociedad y político que se resuelve con razones grandes, no es solo una discusión con mujeres. Entendemos solamente que resolviendo el problema de las mujeres no se construye la paz, por ello para construir la paz es fundamental resolver el problema de las mujeres. Acreditamos el que este problema, estas indagaciones que acontecen hoy en Brasil y sabemos que en varias partes del mundo serán resueltas con la organización de las personas. Las conquistas que tenemos hoy en cuanto a organización, las tierras para las personas afectadas solo fueron conquistadas cuando estas se organizaron y lucharon por aquello que estaban perdiendo. En Brasil a pesar de todas sus riquezas naturales, de toda su belleza, tiene estos problemas y tratamos nosotros el movimiento de los afectados y otras personas proponer cosas diferentes. Quería resaltar la presencia del compañero Helio también del movimiento y estamos abiertos para las preguntas que quieran realizar. Gracias
HABLA LA MODERADORA LUISA DÍAZ
Muchas gracias Alexandra por transmitirnos toda esta fortaleza, estas conquistas que poco a poco ha venido consiguiendo. Ahora nos acompaña Leonora Castaño de la Asociación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas de Colombia ANMUCIC.
HABLA LEONORA CASTAÑO
-De Brasil pasamos a Colombia. Colombia es un país hermoso, rico por su biodiversidad, su multiculturalidad. Con una gente valiente, creativa y alegre, pero un país en el cual las mujeres tenemos que decir, que estamos viviendo una guerra, que no hemos promovido, que no nos merecemos y que nos pertenece. Con más de 40 años de conflicto armado interno, al lado de profundas desigualdades sociales y económicas. Reconocido hoy por Naciones Unidas como el tercer país del mundo con crisis humanitaria y violación de los derechos humanos, con un índice de impunidad del 95%. Nuestro país vive hoy una catástrofe social, económica y humanitaria, nunca antes registrada en la historia de Colombia. El 68% de la población vive por debajo de la línea de pobreza, y la concentración de la tierra está ya en el 87%, después de 40 años de una fallida reforma agraria. Ante este panorama la dos últimas administraciones de los dos gobiernos, lo que nos han propuesto, es un retroceso a la política social, a través de actos legislativos y leyes, que retroceden las conquistas alcanzadas en la constitución de 1991 y el actual gobierno, el gobierno del presidente Uribe Vélez lo que nos plantea es que la denominada política de seguridad democrática, vinculando a la población civil, al conflicto armado, a través de la red de cooperantes del programa de soldados campesinos la zona de consolidación y rehabilitación, esta es la seguridad que nos ofrece el actual gobierno. Las mujeres queremos en otra seguridad, creemos que la seguridad es política, que la seguridad es aquella que nos permite soñar, ser felices, poder ser mamá o no serlo, pensar ser autónomas, tener salud, educación. Vivienda, ganar en inequidad y poder participar de las decisiones y participar en la vida pública y decidir sobre nuestras vidas. Hoy encontramos que lo que se desarrolla en el país es una propuesta de guerra y un modelo que es impuesto desde afuera. Las mujeres estamos sufriendo los efectos devastadores de una guerra, porque la agudización y la violación de nuestros derechos humanos y la crisis humanitaria nos acerca de una manera desproporcionada. De los ya más de 3 millones de población desplazada, registrada en el país, tenemos que afirmar que el 79% de los desplazamientos son mujeres, niños y el 36% de las mujeres que han sufrido desplazamiento han sufrido violencia sexual con hombres desconocidos. La jefatura femenina crece a ritmos agigantados, según lo que dice el observatorio de los derechos humanos de las mujeres en Colombia, hoy alcanza más del 40% de los hogares en estado de desplazamiento. La autonomía y la vida afectiva de las mujeres, es controlada por los actores armados, por los bandos en conflicto; a las mujeres se les imponen códigos de conducta se les controla como se visten, como se peinan. A las mujeres se les obliga tener relaciones o dejar de hacerlo, según el bando que controle el territorio. Las mujeres violadas son obligadas a servir de guías, para luego ser judicializadas; en una palabra tenemos que decir que el cuerpo de las mujeres, es utilizado como botín de guerra. La participación en procesos sociales y comunitarios es castigada muchas veces hasta con la muerte. El liderazgo y el protagonismo político de las mujeres también es castigado, y ejemplo de ello es lo que viene pasando con ANMUCIC la Asociación Nacional de Mujeres Campesinas, Negras e Indígenas de Colombia, una organización que lleva más de 17 años de historia y de lucha organizada por superar las condiciones de exclusión y discriminación de las mujeres del sector rural; organización que ha conquistado durante toda su lucha, derechos muy importantes para las mujeres del país. Como el derecho a la titularidad de la tierra, la capacitación, la participación de un programa de salud, vivienda etc. hoy en claro retroceso con la política del actual gobierno. Pero al trabajo que esta organización ha venido liderando durante tanto los últimos cuatro años los actores armados y especialmente los grupos paramilitares le han pasado cuenta de cobro. Tenemos que registrar que ya más de 7000 mujeres de nuestra organización, han sido desplazadas. De 27 departamentos de Colombia los cuales la organización tenía presencia, hoy sólo podemos llegar a 20 y el pasado 2003 se desató la más fuerte arremetida contra nuestra organización, representada en: desplazamientos forzados de mujeres y líderes de la organización y amenazas directas contra su vida, desaparición forzosa de documentos de nuestras líderes, una de ellas devuelta en condiciones de tortura física y psicológica absolutamente dramática y amenazas para el resto de la dirección de la organización, la otra hoy en día sus dos jóvenes hijas en el municipio Batacúndinamarca van de fosa en fosa común para rescatar por lo menos los restos de su madre. Tenemos que decir que de 1999 con la invasión paramilitar al departamento norte de Santander, más de 600 mujeres de la organización tuvieron que cruzar la frontera hacia Venezuela y la mitad de la dirigencia de ANMUCIC, hoy nos encontramos en el exilio, con todo lo que ello representa en términos de desarraigo, ruptura de nuestro proyecto de vida, dejando atrás nuestras vidas, nuestras historias, nuestros sueños, nuestras esperanzas, nuestras cultura y territorio. Pese drama y a la diversidad nos hemos destacado por la atención la nuestras huérfanas y huérfanos, a las víctimas, a nuestros mujeres líderes desplazadas, por brindar el tiempo que antes dedicaban a la promoción y defensa de los derechos de las mujeres hoy lo estamos dedicando a prestar atención humanitaria y protección a nuestros mujeres, sin casi ningún apoyo estatal. Tenemos que decir, que quienes se han solidarizado permanentemente con nuestra causa, son las organizaciones de mujeres, las defensoras de los derechos humanos, las organizaciones de paz y organizaciones sociales. Hoy nos hemos levantado con la denuncia nacional e internacional ante Naciones Unidas, comisión interamericana de los derechos humanos, comunidad internacional, organizaciones de derechos humanos, logrando el acompañamiento y protección permanente de Amnistía Internacional y brigadas internacionales de paz. Estamos demandando del gobierno nacional del gobierno colombiano la aplicación de la resolución 13/25 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, en el caso de ANMUCIC, exigiendo el cese de hostilidades a los grupos paramilitares, quienes son los que se han ensañado contra nuestra organización. La resistencia y la acción pedagógica de las mujeres permanente, está registrada en nuestra voluntad del movimiento de mujeres por la resistencia, la rebeldía y la acción transformadora expresada en varios proyectos y movimientos que rescata de alguna manera el trabajo que venimos haciendo en nuestro país. Para mencionar algunos, la mesa de trabajo «Mujer y conflicto armado» y el observatorio de los derechos humanos de las mujeres, que trabajan por poner en evidencia nacional e internacionalmente la exarcebación y grave violación de los derechos humanos de las mujeres en medio del conflicto. Iniciativa de Mujeres por la paz que trabaja con la operación SIRIRI buscando presionar los acuerdos humanitarios en mis país y promueve una mesa de mujeres que trabajan por la verdad, justicia y reparación frente al proyecto de ley de alternatividad penal, que propone la impunidad de las negociaciones en los grupos paramilitares. Y la ruta pacífica de las mujeres, que con sus movilizaciones en solidaridad y protección a las comunidades confinadas donde las mujeres son blanco de violación de todos sus derechos y con sus plantones de negro. Y éstas y muchas otras, todas en la construcción de un gran movimiento de mujeres contra la guerra, tenemos que decir que a la guerra las mujeres nos estamos oponiendo nuestra acción social y política. Proponemos la desmilitarización de la vida civil y la negociación política del conflicto. Ganar en democracia y justicia para las mujeres. Muchas gracias
HABLA EL PÚBLICO
-Muchas gracias. Escuchando no me suscitaron tantas preguntas como reflexiones, a partir de lo que las dos compañeras, Alexandra como Leonora. Me llama la atención, porque yo he visto muy presente en la idea de la militarización, que siempre la tenemos asociada a los más explícito a toda la idea de lo que connota lo militar y como se nos escurre en todo lo demás esa militarización sutil y no explícita que yo diría que es la que va poco a poco legitimando la explícita. Alexandra comentaba el tema de la represas; el tema de las represas aparentemente es un problema ecológico y realmente es un problema clarísimo de la otra cara de la violencia, de la violencia también militar y que a mí me remite obviamente a la idea que decías que cuando alguien protesta frente a las represas con lo que connota se dice que es un retrasado en está en el progreso y justamente ¿cuál es esa idea de progreso? ¿Su idea del progreso es justamente una idea militar? La idea del progreso que se nos ha vendido y que llevamos 300 años legitimando de todos los pueblos de la legitimación del saber, es la idea de la militarización del saber. La ciencia moderna justamente que se erige como ciencia de progreso, ha venido legitimando los procesos de devastación y de violencia más desastrosos para la naturaleza y para la humanidad y para las mujeres porque esa ciencia moderna se instaurada en el paradigma de que hay que expoliar a la naturaleza, porque la naturaleza se comporta como una mujer como una novia a la que hay que violar; eso lo decía Bacon en el Novum Órganun y todas las mujeres hemos ido la academia para estudiar a Bacon para llenarnos la cabeza de sus ideas pero al no darnos cuenta de que como mujeres estábamos condenadas a explotar la naturaleza porque era como una novia a la que había que violar ¿cuándo nos hablaron de eso? Y eso es una militarización obviamente porque es el pensamiento de la violencia, del expolio y del desastre y lo han llamado progreso. Y en el mismo sentido Leonora hablaba de cómo el presidente de Colombia militariza los movimientos civiles ¡qué ironía! Porque luego los ejércitos se nos presentan con acciones humanitarias ¡qué ironía! Lo humanitario se reviste de militar y lo militar de humanitario. Todavía rezuma en nuestros oídos, aquellas ayudas que nos pedían soldados españoles en Yugoslavia por ejemplo para llevarles juguetes aquellas criaturas. ¡Devuélvales a los padres y a las madres que les han matado! que ya se preocuparán esas madres y esos padres ¡de llevarles juguetes! O en los colegios de nuestro entorno, los ejércitos presentando sus experiencias humanitarias con palomas mensajeras de la paz ¿nuestros presupuestos son para comprar palomas? Repito más que preguntas, son reflexiones de lo que me ha removido las exposiciones y el encarnamiento de esas palabras. Muchas gracias
HABLA EL PÚBLICO
-Yo soy colombiano y quisiera hacerle una pregunta a la compañera colombiana. Es duro estar en el exilio, ¿como retroalimentan ustedes la información del día a día lo que está pasando en el país? Yo llevo aquí 10 días, pero yo lo veo desde un punto de vista, no sé si la comunicaciones permanentemente con lo que está pasando en el país, es decir ¿cómo se retroalimentan ustedes la información? como miran ustedes, es decir ¿cómo ven ustedes el problema desde el exilio? o ¿como lo vivieron en carne propia? y tú hoy, lo ves desde fuera del país por lo que pasó. Muchas gracias
HABLA LEONORA CASTAÑO
-Afortunadamente por el trabajo de alianza, por el trabajo en red de acumulado social y del movimiento de mujeres que veníamos trabajando en ANMUCIC, en el tema de derechos humanos, de paz, tema agrario; hay toda una red de apoyo del trabajo que estamos realizando aquí de denuncia, y de incidencia frente a la situación que vive Colombia, es conocido ampliamente a nivel nacional al no ser por los poses de los que salimos a divulgar lo que está pasando. Las noticias no dan cuenta, los medios de comunicación, no dan cuenta del drama y de la crisis humanitaria que vive nuestro país, entonces hay una permanente retroalimentación, nosotras aquí en España, tenemos la satisfacción de que todos los meses, llegan compañeros y compañeras de alguna organización; y también a través de la vía del correo electrónico por hoy se hace mucho más fácil estar en permanente contacto y conocer lo que está pasando. Y tú que hace 10 días que acabas de llegar seguramente traes muchísimas más percepciones de lo que vive actualmente Colombia.
HABLA LA MODERADORA LUISA DÍAZ
-Yo solamente agregar que es muy positivo destacar que las mujeres y no solamente las mujeres, sino todas aquellas personas que han tenido que salir de Colombia por la situación de violencia que se está viviendo, llegan a España, y no llegan a cruzarse de brazos para seguir construyendo paz y ir aportando para intentar algún día tener una Colombia más justa y menos violenta por lo menos. Sí que se continúa con el trabajo, no se rompen si no es lo que yo estoy viviendo es decir que no se rompe ese proyecto de construcción de paz.
HABLA EL PÚBLICO (ADRIANA CARMONA)
-Preguntar a la compañera de Colombia ¿cómo han reaccionado los organismos internacionales, concretamente la comisión interamericana a las demandas de justicia? Cómo valoras esa respuesta, es lenta, eficaz.
HABLA LEONORA CASTAÑO
-Hay que decir que ha sido lenta, pero de alguna manera ha contribuido que en el país tengamos menos víctimas, porque en el caso de ANMUCIC, en el caso de las mujeres, los programas de protección del gobierno han sido absolutamente negligentes, con los problemas de amenazas y de seguridad permanente que tenemos. Tuvo que la comisión interamericana de derechos humanos, crear medidas cautelares para que se brindaran algunos mínimos apoyos en términos de seguridad y protección para nosotras. Pero definitivamente, lo que nos ha permitido seguir desarrollando el trabajo, ha sido la acompañamiento y protección de brigadas internacionales de paz que en el país está acompañando el trabajo de ANMUCIC. Y seguimos en la denuncia permanente, porque el caso de ANMUCIC, va estar presentado como un caso que requiere de verdad justicia y reparación frente a todo lo que ha sido la violación de todos nuestros derechos, y, la amenaza contra el trabajo que la organización viene realizando en el país. Son 35 mujeres líderes de municipios y departamentos que nos han asesinado los grupos paramilitares y eso no puede quedar así en la impunidad.
HABLA REPRESENTANTE DE SOLDEPAZ
-Dar las gracias a las compañeras por estar aquí, y en segundo lugar me gustaría que hablarán un poco de las mujeres indígenas; porque parece que las mujeres siempre estamos un paso por debajo, e imagino que las mujeres indígenas deben de tener unas dificultades aún mayores y en el caso de ser mujeres desplazadas aún más. Me gustaría que hablaran un poco de este tema.
Gracias.
HABLA LEONORA CASTAÑO
-Hay que mencionar, por lo menos en el caso de Colombia, la guerra y el movimiento agrario, ya que nosotros trabajamos con mucha fuerza en ese movimiento ya que es la organización de mujeres campesinas, negras e indígenas. Y no hay desplazados y desplazadas porque haya guerra, sino que se hace la guerra para desplazar y desalojar la comunidad de sus territorios, y en este desalojo de comunidades, quienes están viviendo la más dura crisis son las comunidades indígenas y afrocolombianas y también las comunidades campesinas, pero las mujeres, y más cuando no se concibe la situación particular de lo que representan sus necesidades de seguridad y de protección, el drama es mucho más grave. El desplazamiento de las mujeres indígenas y la atención a ese desplazamiento, es prácticamente nula por los organismos nacionales y por los organismos gubernamentales, y lo que se ha logrado ha sido gracias a la solidaridad de las organizaciones de los derechos humanos.
HABLA ALEXANDRA BORGA
-Yo también considero importante hablar aquí que cuando los portugueses fueron para Brasil, masacraron, mataron millares de indígenas, porque no se sujetaron a ser esclavizados y a trabajar para los portugueses. Hoy en Brasil las naciones y los poblados indígenas son pocas en relación a 500 años atrás. Por esto, el sufrimiento y la humillación, la falta de tierras continua y hay una laguna grande en esta cuestión. Existen muchas poblaciones indígenas, la mayoría viven alrededor de ríos a consecuencia de la construcción de las represas, estas poblaciones son afectadas. La mayoría pierden estas tierras y existe un proceso de demarcación de las tierras indígenas en Brasil. Por eso en muchas de ellas viven itinerantes, se desplazan de un lugar hacia otro. Existen también las rutas por zonas específicas indígenas. Creo que hemos avanzado un poco, porque todavía existen muchas macelas frente a los indígenas. Históricamente este problema existe, porque los indígenas fueron millares de ellos muertos, masacrados.
HABLA EL PÚBLICO (JAVIER ARJONA)
-Acababa Alexandra su intervención anterior, diciendo que solamente la lucha en el Brasil y la organización, iba a conseguir la construcción de la paz por la gente afectada atendida por las represas, que es un tema muy desconocido aquí. Ella, compañero Helio, compañero Abrahán de la coordinadora del agua de Cochabamba, van a participar la semana que viene en otro encuentro de la coordinadora de las ONGS de Asturias en Oviedo en la universidad, donde se profundizará este tema, el tema del agua. Y decía ayer la compañera de Palestina, que estaba respondiendo a una pregunta sobre la elección del nuevo presidente de los Estados Unidos, llamando a una Intifada de los pobres, creo que algo parecido se ha dicho en la plaza de mayo este jueves, por parte de las madres, que una respuesta que tenía que ver a esa elección en Estados Unidos, tenía que ser con la unidad de la izquierda o de las izquierdas en el mundo, algo están construyendo parece ser en América Latina en el sur al contrario que en el norte. Por no hablar solamente de las cosas terribles, que ayer se dijeron aquí y que hoy se están diciendo de dos situaciones de guerra Palestina y Colombia o en otro lugar más desconocido, un millón de personas desplazadas por construir represas, un millón de personas ha dicho Alexandra yo le pediría si se puede decir las edades de la compañera que dice que lleva cuatro años en la organización y que me parece que comparemos como están nuestros organizaciones, aquí en Asturias con las de allá. De todo esto seguramente habrá muchas interpretaciones, por ejemplo el que organizaciones tan visibles como la que habló ayer de Colombia y la que está hablando hoy las haya unificado en el exilio, en la represión en la propia guerra en Colombia y otra para la compañera de CEAR creo que esa interpretación de CEAR y de otras organizaciones que el desplazamiento, el refugio, el exilio no solamente tiene que ver con la guerra sino también con las inmigraciones como hay aquí presentes bastantes inmigrantes de la asociación de inmigrantes residentes en Asturias, entre ella su presidenta, que es otro de los temas que no podemos abordar hoy aquí en profundidad pero también desplazada por esa situación.
HABLA LA MODERADORA LUISA CASTAÑO
-Muchas gracias a todos.