El discurso de la afrocolombiana Francia Márquez al recibir el Goldman Prize, equivalente al Nobel de Medio Ambiente, fue calificado de conmovedor y trascendente.
Espacios dedicados a la temática medioambiental en varios de medios prensa locales reprodujeron fragmentos o el texto completo de su ovacionada intervención anoche en una ceremonia en Estados Unidos, donde recibió el reconocido lauro.
El Goldman Prize lo entrega cada año la homónima fundación con sede en la ciudad estadounidense de San Francisco a defensores de la naturaleza y el medio ambiente, repartido en seis categorías en función de la zona geográfica.
Márquez, quien lidera actividades de conservación medioambiental en el departamento del Cauca, en el suroeste de Colombia, resultó elegida como la mejor representante de Sudamérica.
La fundamentación hizo referencia a su lucha por evitar la minería ilegal de oro en su tierra ancestral.
‘Soy una mujer afrodescendiente, crecí en un territorio ancestral que data desde 1636’, comenzó de ese modo su discurso la líder social colombiana de 36 años de edad.
‘Hago parte de aquellos que sueñan que algún día los seres humanos vamos a cambiar el modelo económico de muerte para darnos paso a construir un modelo económico que garantice la vida’. ‘Es hora de actuar, enfriar el planeta es nuestra responsabilidad’, añadió.
Cuando hablo, continuó Márquez, ‘hablo por un lugar de justicia, no solo para negros, también para indígenas, mujeres’.
En su emotiva alocución recordó a la líder social hondureña Berta Cáceres, ganadora de igual premio en 2015 y asesinada en 2016.
‘Este premio es un reconocimiento a todos los que resisten por defender el medio ambiente y la vida. Gracias a Berta Cáceres, que nos sigue acompañando’, remarcó.
La líder colombiana se identificó también como parte de los que luchan contra el racismo estructural y por seguir pariendo la libertad y la justicia.
Viva la Colombia Humana, concluyó.