Día de la Tierra Palestina.
Tras la lluvia llegó el sol, y acompañó a plenitud la actividad con poema, música y flores, vísperas del día de la Tierra.
Día de la Tierra Palestina 2018: Celebrar la resistencia al despojo e intensificar el BDS, como herramienta eficaz contra el apartheid.
La Coordinadora asturiana de ONGd y el Comité de Solidaridad con la Causa Árabe de Asturias compartimos ante este olivo, símbolo reconocido del arraigo a la Tierra de la población palestina, que en 1976 se movilizaban un 30 de marzo contra la desposesión provocada por la ocupación militar israelí.
La historia del olivo es muy lejana y tiene para los amantes de este fruto un encanto mitológico y algo mágico.
Los olivos son venerables árboles antiguos; han escuchado muchos juramentos y han sido testigos de numerosos secretos en sus largas vidas, han dado sus frutos a millones de personas en todo el mundo.
Aquel día de 1976 las fuerzas sionistas asesinaron a 6 palestinos, hirieron a 49 y 300 fueron detenidos.
Esta semana, cuando en aquellos mismos territorios se prepara el día de la Tierra, ya han sido detenidos ayer lunes 43 palestinos, preventivamente.. como una acción más de la ilegal, injusta, inhumana ocupación de Palestina condenada por la ONU.
En Palestina es difícil imaginar una sola casa que no tenga algún árbol de olivo , dan una imagen hermosa y de tranquilidad. El Olivo es el árbol nacional del pueblo palestino y su cultivo trae consigo una tradición milenaria, razón por la cual se ha convertido en una víctima frecuente de las retroexcavadoras israelíes que han arrancado cientos de miles del árbol de la oliva. El ataque sistemático del Ejército israelí a los árboles palestinos empezó en 1967 con la ocupación israelí del territorio palestino y resultó en el desarraigo de más de un millón de árboles hasta el año 1999. Todavía la semana anterior arrancaban 5mil de estos ejemplares.
Mientras haya aceitunas, las campesinas de Palestina serán invencibles, y por eso sus adversarios descargan su odio contra los árboles, de manera que el sionismo se convierte también en ecocida.
La gentes palestinas no se imaginan a sí mismas sin la tierra y su especial modo de vida. Si se destruye, la humanidad perderá sus raíces y se estrellará sobre las rocas de la historia.
Rim Banna ha fallecido el sábado. Y queremos recordarla en su concierto en el Teatro Jovellanos. Su sonrisa y su trabajo con el folklore palestino, activista cultural contra el apartheid.
Ahed Tamimi sigue presa, condenada a ocho meses de prisión militar, por rechazar el ataque contra su familia, las heridas graves sufridas por su primo, la constante humillación que la ocupación militar hace contra su aldea. Nur y Narimán, prima y madre de Ahed, también han sido condenadas por oponerse a la ocupación, al aparheid ilegal de Palestina.
Contra ese apartheid que averguenza a la humanidad se recrea y acrecienta la herramienta BDS, que tan útil fue tambien para acabar con el apartheid sudafricano.
Estos días, la campaña BDS está indicando a la transnacional Adidas que no hay juego límpio posible dentro del apartheid y la limpieza étnica
y que retire el apoyo que está prestando su marca para encubrir y blanquear los abusos de derechos humanos de Israel.
También la diáspora, los millones de personas palestinas refugiadas, que están siendo de nuevo martirizadas por la decisión del presidente yanqui de retirar su obligada cuota a la UNRWA, la agencia especial y específica que los gobiernos del mundo crearon para intentar atender a casi 6 millones de expulsados de su TIERRA.
Mientras tanto, el olivo de Montevil en Xixón sigue creciendo lozano, y sigue auspiciando los DERECHOS de la población palestina, en los mismitos términos que se ha pronunciado de forma reiterada la ONU, y que Israel violenta de forma sistemática.