Desaparecidas.
Continúa la labor de búsqueda de personas desaparecidas forzadamente en el marco del conflicto armado colombiano, y en esa tarea han estado en el Consejo de DDHH de la ONU en Ginebra la señora Zenaida Rubio, madre de joven desaparecido por el ejército, y Naya Parra, del colectivo sociojurídico Orlando Fals Borda-COFB. https://www.cofb.org.co/
Y de regreso han pasado por el Ayto de Madrid, por Barcelona y por Asturias. Y han contado..
Al director de la agencia asturiana de cooperación, a los grupos parlamentarios en la JGPA, a las autoridades locales de Langreo, y al público en el Ateneo Obrero, que..
Que la señora Zenaida lleva años paseando la foto de su hijo Wilson porque se ha atrevido a superar los temores y los horrores de la guerra para exigir justicia por su desaparición forzada. ¿Qué por qué sabe que fue el ejército?. Pues porque ya se sabe que están sus restos en el cementerio municipal de la Macarena, aunque todavía el Estado colombiano no haya procedido a entregárselos. Y es que este cementerio…y esas fosas con centenares de cuerpos, tantos que produjeron una primera contaminación de las aguas que dieron una primera alerta.. ese cementerio municipal, al lado del batallón del ejército fue la chispa que propició un cambio de tendencia, y los familiares se lanzaron a denunciar , y el COFB se alió con otros grupos y propiciaron una Audiencia internacional, con eurodiputados , con senadoras/es , con colectivos sociales, y denunciaron fuerte. Primero el gobierno negó. Pero una tan horrenda fosa, con tantas personas NN, o sea sin identificar, no podían esconderse tanto tiempo. Y luego fueron otros cementerios municipales, y fueron las conversaciones de la Habana donde el tema se trató en específico, y fueron las primeras exhumaciones, y fue cambiando el negacionismo oficial, para comenzar una etapa, dura, pero distinta, en la que se han podido entregar de forma digna los restos de centenares de personas que antes enterraron como NN. Y eso ha conllevado a conocer “qué dicen los cuerpos”, qué verdad esconden, cómo muchos de esos cuerpos muestran las evidencias de que fueron ejecuciones extrajudiciales, asesinatos del ejército a jóvenes no combatientes, para recibir prebendas, ascensos, estipendios: son los bautizados como falsos positivos: positivos que había que mostrar para tratar de presumir de batallas ganadas: cuantos más muertos, más beneficios. Y más horror.
¿Las cifras?. Impresionan. Más de 82.000 desaparecidas según en centro de memoria. Muchas más según las organizaciones. (El Centro Nacional de Memoria Histórica – CNMH, tiene un registro superior a 82.000 víctimas de desaparición forzada, sin embargo, Equitas Colombia indica que la cifra puede ser del doble.) Esto es más que en todas las dictaduras militares del cono sur…solo que “en democracia” colombiana.
Y se consiguió, además de empezar a entregar cuerpos de forma digna a sus familias, que se tomara en serio en asunto, que se propusiera y aprobara una Unidad de Búsqueda, que apenas acaba de empezar, que precisa de 500 profesionales y solo tiene 16, que necesita presupuesto y desarrollo de sus potencialidades, pero que es pese a todo un avance, que además logra disminuir el miedo, el silencio impuesto por tanto tiempo.
Asturias.. ha sido citada de forma recurrente por el COFB. Por sus delegaciones al terreno cada año durante 14 versiones: algunas de ellas a los territorios donde se buscan esos cuerpos, incluida la fosa de la Macarena. Por el acompañamiento a las organizaciones colombianas que se han atrevido a denunciar las desapariciones. Por atender a un centenar de personas perseguidas, en Asturias. Por apoyar directamente las investigaciones del COFB, que, ahora, además tiene alianza con gobernaciones como Nariño para seguir en esa tarea, macabra, pero necesaria: con el objetivo de que miles de familiares puedan completar el duelo de sus seres queridos desaparecidos, hayan sido combatientes, hayan sido civiles.
En las conversaciones no se ha podido obviar la comparación: En medio de una guerra que no termina Colombia exhuma cuerpos, inicia investigaciones de fosas y enterramientos y los familiares tienen expectativas que tal vez se puedan cumplir. ¿Y en nuestro país…80 años después.. cuántas fosas, cuántos cuerpos de personas desaparecidas están pendientes de ser entregadas de digna manera a sus familiares?
El mensaje más perentorio, en Ginebra y en Asturias, entregado por Zenaida y Naya es que… se hagan cumplir y se ayude a desarrollar lo iniciado, de acuerdo con las leyes y las nuevas normas acordadas. Que no se revierta por el nuevo gobierno Duque lo apenas comenzado, y que la Unidad de Búsqueda, y la Fiscalía, y las entidades estatales, se pongan al servicio de esta tarea ingente, colosal, imperiosamente necesaria de conocer la verdad de lo acontecido y colocar a las víctimas en el centro de lo que se vaya a construir en un país tan necesitado de paz, de concordia, de reparaciones colectivas, de perder los temores por las atrocidades cometidas en medio de una guerra.. que no termina, entre otras cosas por los incumplimientos flagrantes de lo pactado.
«Contemos la verdad»
A través de la campaña “Contemos la Verdad, porque todas las Personas No Identificadas Tienen una Historia”, localiza a las familias de las personas desaparecidas que se han identificado para lograr la restitución de los cuerpos a sus seres queridos, mitigar el dolor de la ausencia y la búsqueda de los desaparecidos e iniciar los procesos de construcción de memoria histórica, de exigibilidad de derechos y fortalecimiento organizacional de las víctimas.
siempre les diremos a las víctimas: #CuentenConmigo.
a familiares de personas desaparecidas #CuentenConmigo
para la paz #CuentenConmigo
#NosFaltan86mil Entrega digna