Declaración del Caucus Latinoamericano
Cumbre Mundial de los Pueblos Indígenas
Nueva York.– Iniciar un proceso que garantice la plena participación de los pueblos indígenas en la construcción de la agenda, el desarrollo y el seguimiento de las conclusiones de la Cumbre Mundial de los Pueblos Indígenas del 2014, de la cual debe emanar la adopción de una Declaración Universal de Derechos de la Madre Tierra, son las principales recomendaciones de la Declaración del Caucus Latinoamericano que fue leída hoy por Miguel Palacín Quispe, Coordinador General de la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (CAOI) en el XI Período de Sesiones del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de la ONU. Aquí el texto de la Declaración:
La Organización de Naciones Unidas ha convocado a una Cumbre Mundial de los Pueblos Indígenas para el año 2014, a propuesta de Bolivia. Expresamos nuestro respaldo, y felicitación al embajador De Alba y apoyamos a los cofacilitadores, manifestando que los pueblos indígenas del Abya Yala y del mundo debemos ser los protagonistas, para dar a conocer nuestra agenda y nuestras propuestas frente a la crisis global que azota el planeta, desde los pueblos y las organizaciones indígenas, para un diálogo directo con los Estados.
Los pueblos indígenas del Abya Yala y del mundo somos herederos de grandes civilizaciones y hemos conquistado con muchos sacrificios el reconocimiento de nuestros derechos en instrumentos jurídicos internacionales. Sin embargo, los Estados no los respetan, lo cual hace necesario que los comités de las Naciones Unidas hagan la debida vigilancia a esos Estados.
La agenda de la coyuntura actual se concentra en la discusión del modelo neoliberal que vulnera nuestros derechos y los derechos de la Madre Tierra, y reduce a nuestros Estados a su mínima expresión, dejándoles la única tarea de dictar políticas públicas que favorecen las inversiones, en el caso del Abya Yala, de actividades predominantemente extractivas.
Producto de ello, los pueblos indígenas sufrimos múltiples impactos: despojo de nuestros territorios y bienes naturales, desplazamientos forzosos, contaminación ambiental, daños a la salud, violación de nuestros lugares sagrados, imposición de modelos ajenos de desarrollo, desconocimiento de la consulta y consentimiento previo, libre e informado. Además, criminalizan nuestras protestas contra estos atropellos.
Ante esta imposición de un modelo homogeneizador, depredador y represivo, que ya evidencia su inviabilidad en las múltiples crisis (financiera, climática, política, etc.), los pueblos indígenas del Abya Yala tenemos mucho que aportar, desde nuestros principios y prácticas ancestrales del Buen Vivir/Vivir Bien, en armonía con la Madre Tierra, desde nuestras formas comunitarias de organización y toma de decisiones, desde nuestra adaptación a las más diversas geografías y climas.
Por ello, los pueblos indígenas del Abya Yala recomendamos:
· Que el Foro Permanente y demás instancias de las Naciones Unidas y los Estados fortalezcan y garanticen la realización de un proceso serio desde los pueblos para participar en la realización de la conferencia Mundial sobre pueblos indígenas.
· Que el Foro Permanente y demás instancias de las Naciones Unidas fortalezcan los procesos organizativos, de capacitación y de participación de los pueblos indígenas en los espacios de toma de decisiones hacia la conferencia, en cumplimiento de la Declaración sobre los derechos de los pueblos Indígenas.
· Que se garanticen mecanismos de participación plena de los pueblos indígenas, antes, durante y en el seguimiento de las conclusiones de la Conferencia Mundial del 2014.
· Que estos mecanismos de participación y la agenda de la Conferencia Mundial se construyan en un proceso conjunto de las agencias de Naciones Unidas y los propios pueblos indígenas.
· La cumbre de los pueblos debe significar la discusión de nuevos paradigmas en el mundo como: los Estados plurinacionales, frente al estado nación en crisis. Y frente al cambio climático y la propuesta de economía verde, el BUEN VIVIR, como la alternativa a la crisis civilizatoria.
· La Cumbre debe significar el compromiso de los Estados en el cumplimiento de los derechos de los pueblos indígenas en la implementación de políticas y acciones a favor de los pueblos indígenas.
· Que a partir de esta Cumbre, la Asamblea General de Naciones Unidas adopte una Declaración Universal de Derechos de la Madre Tierra.
Nueva York, 14 de mayo del 2012.