La Declaración indígena.
Y mañana lunes 13-S, la Axencia asturiana de cooperación, con motivo del aniversario, tiene preparada una actividad proindígena en la escuela de comercio de Xixón.
El “tiempo” indígena, la persistencia de la resistencia y capacidad de propuesta del movimiento indígena, se está mostrando cada vez como más imprescindible.
Para la propia sobrevivencia del planeta.
Y bastaría.. con hacer cumplir aquella Declaración. Con hacerla conocer, difundir y comprender en los colegios, en las universidades. ¿acaso no es hora ya?. Con hacer cumplimiento de su articulado, en los gobiernos, en las corporaciones empresariales.
El 13-S no es un “día internacional” pero es un aniversario relevante.
Los Derechos ya han sido reconocidos en dicha Declaración. Aunque en el primer momento algunos gobiernos pusieron zancadillas a su aprobación, luego resultó que solo cuatro votaron en contra, Estados Unidos, Canadá, Australia, Nueva Zelanda , y además, sucesivamente fueron también aprobándola, así que hay máxima unanimidad mundial.
Cumplir y hacer cumplir la Declaración, ese es el reto, el desafío, la propuesta pertinente.
Los pueblos indígenas de todo el mundo tienen a partir de entonces el derecho a la autodeterminación, al control de sus tierras y sus recursos naturales y la preservación de su cultura y sus tradiciones.
La antigua Procuradora General de Asturias, se hizo eco y difundió miles de ejemplares. Hace dos años los aytos de Llanera y de Xixón apoyaron una edición ilustrada por Alberto Vázquez https://issuu.com/soldepaz-pachakuti/docs/derechos_indigenas . Pero claro que es insuficiente. Nuestra Universidad debiera también incluir en contenidos y programas. Incluso en masters y tesis. El parlamento astur se ha pronunciado en dos ocasiones en su apoyo, levemente, pero apoyo.
Al gobierno, a los gobiernos les corresponde ejecutar y desarrollar, en las diversas esferas en que los Derechos del mundo indígena “nos afectan” en mayor dimensión. ¿Y acaso no es una de las mayores la llamada emergencia climática, el desastre del clima, frente al cuál las comunidades, pueblos y nacionalidades de los pueblos originarios han estado desde siglos aportando su cosmovisión, su forma respetuosa de tratar a la Tierra Madre? ¿No son acaso los pueblos indígenas quienes con sus prácticas han contribuido, y lo harán en el presente y futuro si se les deja, a enfriar el planeta?
Coincide este nuevo aniversario del 13-S, con potentes movilizaciones indígenas en Brasilia. Los Derechos conquistados, pero ahora violentados por Bolsonaro, están al centro de esas marchas.
Sigue gravísima la emergencia en la Amazonía http://www.justiclima.org/spip.php?article77 , y desde allá su organización mayor, la COICA, acaba de compartir un logro importante en Marsella: llevaron una propuesta y fue aprobada esta semana.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) aprobó una moción presentada por los pueblos indígenas que pide proteger el 80 % de la Amazonía al 2025.
Esta moción compromete a los Estados miembros de la UICN a “proteger, conversar y manejar de manera sostenible al menos el 80 % de la Amazonía para el 2025”, “en colaboración con y reconociendo el liderazgo de los pueblos indígenas de la Amazonía, asegurando su consentimiento libre, previo e informado”.
La COICA representa a 511 pueblos indígenas de nueve países de la Amazonía, la selva tropical más grande del mundo considerada una de las áreas del planeta con mayor biodiversidad.
Frente a la galopante deforestación, las mujeres indígenas que han plantado campamento en Brasilia han puesto título a su movilización: Reforestación de las mentes para curar la tierra.
En tierras mesoamericanas fulguran cada vez más los ejemplos de Berta Cáceres, de Miriam Miranda. De Lolita Chávez que hablará mañana en Xixón.
Casualidad que el 13-S estén saliendo porfín, tras meses de impedimentos, 177 indígenas de distintos pueblos de México rumbo a Viena, para después distribuirse por distintos lugares de Europa en Caravana por la Vida, y que este fin de semana haya habido preparativos en Mieres, en jornadas proZapatistas. Dicen que vienen a aprender. Dicen que vienen a compartir con quienes apuestan por la Vida.
Significativo es también que la Agenda 2030 para el Desarrollo y los Objetivos de Desarrollo Sostenible establezcan metas e indicadores relevantes para los pueblos indígenas y que las Naciones Unidas hayan adoptado un Plan de Acción para los Derechos de los Pueblos Indígenas. ¿Se desarrollarán dichos compromisos o quedará en mera retórica?.
El contenido de la Declaración, los Derechos de los Pueblos Indígenas, su cumplimiento cotidiano, no solamente pueden valorarse sin mucha dificultad, sino que además siguen constituyendo uno de los ejes centrales de la preservación de la VIDA. Del respeto a gentes, pueblos nacionalidades, pero también…del respeto al planeta, su supervivencia, los ODS, la cumbre del clima de este año en Escocia… y la defensa de la Madre Tierra como centro. O su destrozo.
Los pueblos indígenas nos proponen alternativas para el buen vivir; ejercen los derechos colectivos en lo territorial, político, cultural y espiritual, incluso más allá y más antes de la Declaración.
La resistencia indígena, el avance organizativo en medio de la dispersión colonial vigente, las alianzas con sectores no indígenas y el indudable arrope de juristas del ámbito internacional llevaron precisamente a la más política de las Declaraciones, la del 13 de septiembre de 2007.
En territorio del Chile que ayer conmemoraba 48 aniversario del golpe militar que impuso una constitución que sigue vigente.. una amplísima movilización de varios años ha posibilitado una convención constituyente, en cuya elección se han incluido algunos representantes de todos los pueblos originarios. Y que una mujer mapuche, la lingüista Elisa Loncon, haya sido electa para presidirla.
*7 años después, la ONU celebraba la única Conferencia Mundial sobre Pueblos Indígenas celebrada hasta el presente: http://www.miradoriu.org/spip.php?article519